Economía y negocios

La mayoría de las conserveras de Cantabria están dispuestas a adherirse a la Indicación Geográfica Protegida de la anchoa

Algunos empresarios exigen que la IGP incluya a todo el sector y no haga referencia a las localidades donde se elabora el producto

José Luis Ortiz, director general de CODESA

Laredo (Cantabria)

Ocho de cada diez empresas conserveras estarían dispuestas a adherirse a la Indicación Geográfica Protegida de la anchoa elaborada en Cantabria y más de la mitad de los consumidores pagaría más por este producto.

Son conclusiones del estudio que ha encargado la Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Alimentación a un equipo de investigadores de la Universidad de Cantabria para analizar la viabilidad de la IGP.

Los autores del estudio han dado a conocer los resultados en un encuentro entre la Consejería y el sector para impulsar este distintivo de calidad, del que ha informado este sábado en un comunicado el Gobierno regional.

La decisión es de lo conserveros

Según la consejera, María Jesús Susinos, el estudio "plasma bien a las claras la idoneidad" de la IGP de la anchoa, y el Gobierno apoyará la decisión que tomen los conserveros.

"Son ellos los que tienen que decidir si quieren contar o no con ese sello de calidad que impulse uno de nuestros productos más emblemáticos en el mundo", ha señalado.

Este sello, ha apuntado, fortalecería la anchoa de Cantabria y a las empresas que lo elaboran, defendiéndolos de posibles amenazas de otros mercados.

"Pero, insisto, son ellos los que tienen que decidir si lo quieren impulsar y en qué condiciones. Y en ese momento el Gobierno de Cantabria les apoyará sin fisuras", ha subrayado.

El presidente de Consesa, Eduardo Sanfilippo, valora como punto fuerte para apoyar la IGP la protección legal de un producto que ya goza de mucho prestigio y calidad.

José Luis Ortiz, director general de la conservera Codesa, comparte que es necesario crear un sello de calidad, pero huyendo de topónimos y donde quepan todas las empresas.

Para los consumidores, la mejor pero no saben que es IGP

La Universidad de Cantabria ha hecho una encuesta a los consumidores, otra a los conserveros y entrevistas en profundidad a las empresas dentro del estudio que le ha encargado el Gobierno regional.

Su objetivo ha sido analizar su percepción sobre la semiconserva de la anchoa y el valor que se atribuye a los diferentes orígenes de este producto.

Según las conclusiones del estudio, los consumidores reconocen a Cantabria como la región con anchoas de mayor calidad de España y eligen el Cantábrico como primera opción.

Se quedan con Santoña como la localidad con anchoas de mayor calidad y destacan también el sabor y la tradición del producto con origen en Cantabria.

La mayor parte desconoce el significado de IGP pero cuando se les ha explicado en la encuesta, un 55 por ciento se ha mostrado dispuesto a pagar más por anchoas con ese distintivo. Eso sí, la mayoría asumiría un incremento del precio no superior al 15 por ciento.

El valor añadido de la IGP

Para las empresas el sello aportaría como valor añadido al producto el fortalecimiento de la sostenibilidad y la pesca responsable.

Además valoran como puntos fuertes para apoyar la IGP la protección legal frente a competencias desleales, la innovación tecnológica y, la potencialidad del turismo gastronómico.

La colaboración con otras marcas para un mayor posicionamiento en mercados internacionales, la educación y la formación del sector son otros puntos positivos para el sector.

Los requisitos fundamentales que debe cumplir el producto para alcanzar la IGP pasan por la elaboración en Cantabria de una anchoa procedente en primavera del Mar Cantábrico.

Santiago Redondo Brizuela

Cubre la información de la zona oriental de Cantabria....