Pensionistas vascos. Katea ez da eten

Bilbao

Por décimo lunes consecutivo, los pensionistas vascos reclamarán hoy en la calle pensiones dignas. No van a parar, eso dijeron ayer, todavía digiriendo el éxito del sábado, sobre todo en Bilbao: 115.000 personas en la manifestación, la mayor de España. 

Se extrañan fuera por la dimensión de las protestas en la comunidad con las pensiones más altas de España. Soy lega en esto, solo se me lo explico por la tradición reivindicativa en nuestra tierra. Cada semana, quince días hay una manifestación. Nuestra experiencia política está rebosante de ellas: las grandes manifestaciones contra ETA, ahora contra la dispersión, las del nacionalismo...pero, sobre todo, las de la reconversión industrial. Muchas, muchos de los pensionistas, viudas, que ahora salen a la calle se curtieron en los ochenta y noventa en las grandes movilizaciones y huelgas de la crisis siderometalúrgica y naval: las de Euskalduna en Bilbao, la marcha de hierro en Altos Hornos en la margen izquierda. Lo perdieron todo y lo que ganaron lo hicieron luchando.

Tres décadas después muchos han vuelto a la calle. Ya saben: Porque fuimos somos y porque somos seremos. Katea ez da eten.