El Ayuntamiento ha dado orden para derribar la cruz de Egirleta en el alto de Santo Domingo
Se trata del último símbolo franquista que queda en la Villa
Once años después de que viera la luz la Ley de la Memoria Histórica, el Ayuntamiento de Bilbao procede a eliminar el que, dicen, es el último vestigio: la cruz de inspiración carlista fue levantada en 1939 en el lugar donde los requetés colocaron las banderas de España antes de la toma de Bilbao.
Es un paso más en la política de revisión del pasado que no ha estado exenta de polémica. La más airada fue la que se desató a raíz de los cuadros de los alcaldes durante la dictadura. Finalmente, se optó por habilitar una sala específica en la que colgar los retratos "contextualizados", explicando cuáles fueron las decisiones que se tomaron en el seno del consistorio durante sus respectivos mandatos.
El siguiente paso fue renombrar el callejero siguiendo las recomendaciones de historiadores expertos, eliminando aquellos nombres de personas que supusieran una exaltación del franquismo. También se ha 'borrado' del edificio de Hacienda en la plaza Moyua el águila y se retiraron del cementerio de Derio las estatuas de los soldados.
Esta vez se ha recurrido al instituto de la memoria Gogora del Gobierno vasco para "documentar y contrastar" que ese monumento supone "una exaltación de eventos antidemocráticos". Con ese informe favorable, la concejal Gotzone Sagardui explica que en los próximos días técnicos de Obras y Servicios procederán a su demolición. "Se va a eliminar así el último vestigio del franquismo", según la propia Sagardui que anticipa que no se va a colocar en su lugar ninguna placa o elemento que recuerde lo que allí ocurrió.