El paro creció un 3,5% en mayo y sube en 14.336 personas

Madrid

Más de la mitad de los parados registrados en mayo son de la Comunidad de Madrid. La región también es la provincia que más parados nuevos registró en mayo: 14.336, frente a los 26.573 de todo el país. El sector servicios es el más castigado: 99 de cada 100 empleos perdidos vienen de ahí.  La industria madrileña sigue fabricando desempleados; mientras que el paro solo baja en la construcción y, muy levemente, en la agricultura.

En términos de afiliación, la Comunidad de Madrid es también la región que más empleo destruyó en mayo: 7.060 puestos de trabajo, mientras que el conjunto del país ya empezó a crear empleo en el quinto mes del año. De hecho solo 4 de las 17 Comunidades destruyeron empleo. Más de 530.000 trabajadores seguían con el empleo suspendido en mayo bajo la figura del ERTE, mientras que más de 181.000  autónomos madrileños estaban recibiendo la prestación por cese de actividad. 

En término anuales, el crecimiento del paro es mucho mayor. Comparado en el mismo mes del año pasado, el número de desempleados ha crecido un 23% y ha llegado a los 419.359. La Comunidad de Madrid es una de las cuatros autonomías donde el paro ha subido en mayo.

La Comunidad Culpa al Gobierno Central

El Gobierno de la Comunidad de Madrid ha admitido que el dato es negativo y responsabilidad del ejecutivo central. El consejero de Economía, Manuel Giménez, ha asegurado que si se hubiera permitido a Madrid cambiar de fase antes, el empleo no se habría visto tan afectado. 

Sindicatos y patronal defienden los ERTEs

Los agentes sociales madrileños, patronal y sindicatos, están de acuerdo en que los Expedientes Reguladores Temporales de Empleo (ERTE) están sirviendo de escudo social a los trabajadores y dan oxígenos a las empresas. Eva Pérez, de Comisiones Obreras defiende que "si los nuevos datos del paro reflejan un parón de actividad, es porque porque cada nueve personas en desempleo hay ocho en un ERTE".

Patronal y sindicatos han pedido al Gobierno central que amplíe los llamados ERTEs por fuerza mayor que deberían vencer a finales de junio. Miguel Garrido, presidente de CEIM, propone que los ERTEs se prolonguen hasta el 21 de diciembre "para que las empresas reincorporen poco a poco a su plantilla conforme se recupere la actividad".