Memoria de Mallorca pide "precaución" en la exhumación de la fosa de Bunyola
Maria Antonia Oliver, presidenta de este colectivo, ha atendido a la SER y ha avisado de que "después del tiempo transcurrido, no es fácil dar con los restos de estas quince personas"
Palma
El pasado 31 de agosto, lunes, comenzaron las tareas de exhumación de la fosa de Bunyola con el objetivo de localizar los restos de 15 personas que fueron asesinadas durante la Guerra Civil, abandonada en cunetas y, posteriormente, enterradas en una fosa común en el cementerio de este municipio. La finalización está prevista para el próximo 10 de septiembre.
La presidenta de Memoria de Mallorca, Maria Antonia Oliver, ha atendido a esta emisora en 'A Vivir que son dos días Baleares' para explicar y hacer balance de estas tareas, enmarcadas en el segundo Plan de Fosas del Govern. Se ha mostrado satisfecha hasta este momento; sin embargo, aboga por la "precaución", pues el tiempo transcurrido desde los hechos hasta hoy "complica las labores de búsqueda".
Los hechos tuvieron lugar entre el 6 de agosto y el 28 de diciembre de 1936, poco después del inicio del conflicto, llegaron al cementerio de Bunyola una quincena de cadáveres. Hasta el momento, han sido identificadas 9 personas, por lo que aún faltan 6. Entre estas últimas podrían encontrarse tres menorquines: los hermanos Bartomeu y Sebastià Carretero Gornés, y José Filomeno Pons Sintes. Al parecer, los tres, naturales de Ciutadella, viajaron juntos a Mallorca para hacer de testigo en un juicio.
Por motivos como este, Oliver ha explicado que "lo más importante de todo es encontrar a las víctimas, especialmente por sus familias".