Hay días en que se hace verdad esa frase que dice «una imagen vale más que mil palabras». Así ha comenzado la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, su alocución tras firmar el protocolo de apertura del Pazo de Meirás. Ha querido estar presente Calvo en un día en que las administraciones públicas han ratificado su compromiso para abrir al público todo un símbolo de la dictadura franquista. Frente a la puerta principal del recinto, una representación de la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica se ha concentrado reclamando que se ponga fin a la «impunidad» del franquismo. Calvo, que se ha acercado a agradecer su presencia, ha tenido un intercambio de pareceres con Carlos Babío, sin cuya investigación no habría sido posible la recuperación del Pazo. Babío no ha accedido esta mañana al inmueble. El Pazo de Meirás abrirá sus puertas este próximo 1 de julio siendo ya propiedad de quienes quieran recorrer sus jardines. Sólo los jardines, al menos por ahora, ya que el estado interior del inmueble y las inversiones que es necesario acometer no permiten una apertura total. El Concello de Sada gestionará las visitas, que se harán en grupos de 20 personas con una hora y media de duración. Habrá que reservar previamente en reservaspazodemeiras@sada.gal o en los teléfonos 981 620 075 (EXT 264) o 638 421 054. El alcalde de Sada, Benito Portela, ha recordado a todos aquellos represaliados durante los años de la dictadura, empezando por algunos vecinos de su municipio, como los hermanos Suárez Picallo, José Monzo o el alcalde Fernández Pita. Quedan todavía cuestiones por detallar, especialmente la que por ahora genera más discrepancias entre Xunta y Estado, ¿cuál será el contenido que dote al Pazo de un verdadero relato histórico? Entre las administraciones hay acuerdo en lo fundamental: Meirás debe ser un lugar para la recuperación de la memoria y también un sitio para homenajear a su última e ilustre legítima propietaria, Emilia pardo Bazán. Carmen Calvo ha insistido varias veces en que las Torres de Meirás deben ser un lugar a preservar «de forma coordinada y leal», un espacio al que muchos «vendrán a encontrar el relato de la verdad de lo acontecido» durante cuatro décadas de dictadura. Un espacio que recoja también el relato «fidedigno» de Emilia Pardo Bazán. El recorrido por el Pazo evidencia el mantenimiento que se ha hecho ya durante estos meses. Hay menos maleza, los caminos han sido arreglados y señalizados. La capilla lateral estaba también abierta, por lo que desde fuera se pueden ver las estatuas del Pórtico de la Catedral de Santiago, Abrahám e Isaac, inmersas en su propio proceso judicial para establecer la titularidad. No ha estado presente en esta firma el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, que en agenda tenía programado un acto en Logroño sobre el Camino de Santiago. En su lugar ha acudido el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez, quien ha reclamado para Meirás una «recuperación de su esencia», el homenaje a la intelectual feminista Emilia Pardo Bazán. Rodríguez ha mostrado ademas al Gobierno central la «total colaboración» de la Xunta de Galicia para la recuperación del patrimonio mobiliario que hay dentro del Pazo. Han acudido también al acto institucional el presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso, y la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, como representantes del resto de administraciones que han estado implicadas en la recuperación del Pazo. A excepción de Rey y Calvo, todas las autoridades han hecho sus declaraciones en gallego, todo un símbolo también de lo que significa esta jornada para Galicia.