Del "acabaré con Madrid Central" a calcar el proyecto de Carmena: así serán las restricciones de Almeida
A pesar de las críticas vertidas por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, contra el plan estrella de la anterior corporación, la propuesta del Consistorio absorbe medidas ya previstas en 2018
El Madrid Central de Manuela Carmena fue el caballo de batalla que empleó el Partido Popular durante la campaña de las elecciones municipales de 2019. El candidato José Luis Martínez-Almeida se convirtió en uno de los principales detractores de la ordenanza de movilidad que la corporación progresista puso en marcha en 2018. "Madrid Central se tiene que acabar, ha sido un fracaso", aseguraba Almeida en la campaña.
Sin embargo, el discurso ha cambiado en apenas tres años. "Este Ejecutivo tiene un proyecto de gobierno, un proyecto de investidura, y en ambos se hablaba específicamente de mejorar Madrid Central", declaraba el alcalde hace tan solo una semana, durante la presentación de la propuesta de la nueva ordenanza de movilidad del Consistorio.
El texto, que deberá votarse en el pleno del Ayuntamiento el próximo 10 de septiembre, cuenta con medidas incluidas en la anterior normativa, aunque con ciertas modificaciones.
Una regulación "necesaria e imprescindible"
La derogación del antiguo Madrid Central quedó certificada el pasado mes de mayo por parte del Tribunal Supremo. Sin embargo, desde el Partido Popular en el Ayuntamiento y Comunidad de Madrid -entre otros- se presentaron con anterioridad varios recursos ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid para que declarase la nulidad de la norma.
A pesar de la batalla judicial emprendida desde el Consistorio, el preámbulo del proyecto normativo del Gobierno local especifica que la nueva regulación responde a la necesidad de "proteger la salud pública, el derecho a la vida y a la integridad física, así como el derecho a un medio ambiente urbano".
Los motivos que alega la actual corporación para aprobar la nueva ordenanza es que se trata de una norma "racional, necesaria, imprescindible y proporcional para satisfacer dichas razones imperiosas de interés general".
Aunque la propuesta de Madrid Central fuera duramente criticada por los populares durante la campaña de 2019, la propia norma reconoce que existen "razones que motivan" la aprobación de determinadas medidas para mejorar la calidad del aire.
La gran novedad: Plaza Elíptica
La principal novedad que contempla el Gobierno local pasa por la creación de una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que afectará, a partir de 2025, a la totalidad de Madrid capital, así como dos Zonas de Bajas Emisiones de Especial Protección (ZBEDEP): la zona central -contemplada en la propuesta de la anterior corporación- y Plaza Elíptica.
La inclusión de este área como ZBEDEP responde a los elevados niveles de dióxido de nitrógeno registrados en los últimos años, especialmente durante el 2020, cuando, a pesar de la caída de tráfico por la pandemia, la estación de medición de fue la única de España que sobrepasó los niveles máximos de polución marcados por la Unión Europea.
Para mejorar la calidad del aire de las nuevas ZBEDEP, Borja Carabante, delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento, asegura que es necesario restringir la circulación de los vehículos más contaminantes. "Los coches con etiqueta A (sin distintivo), contaminan 7,2 veces más que los vehículos B y 42 más que los Eco. Por tanto, es necesario delimitar la circulación de este tipo de vehículos, pero sin llevar a cabo una política de restricción masiva”, afirma.
La acotación propuesta por el Consistorio pasa por delimitar el tránsito de los vehículos sin distintivo en las ZBEDEP, salvo para los residentes y, a diferencia de lo establecido por la anterior normativa, los comerciantes.
La exclusión de estos últimos del apartado de prohibiciones ha sido duramente criticada por diversos colectivos, al suponer un aumento en la circulación de vehículos que puede alcanzar los 18.000 viajes, según un informe de Ecologistas en Acción. Juan Bárcena, coordinador de calidad del aire de la organización, asegura que esta novedad supone un retroceso para la capital.
“Permitir que los vehículos de los comerciantes puedan circular por las nuevas ZBEDEP implicará un aumento de los viajes y de la contaminación. Además, la inclusión de Plaza Elíptica en las zonas protegidas tampoco es un avance suficiente. El 95% de los coches que circulan por la zona van a seguir haciéndolo, ya que hay muy pocos vehículos sin distintivo. El problema de Plaza Elíptica es el acceso a Madrid por la A.42, que pasa por debajo, no tanto los coches de la superficie. Es anunciar algo que no tiene tanta relevancia", afirma Bárcena.
¿Pasarán más coches por las zonas restringidas?
El número total de vehículos registrados en la Comunidad de Madrid ascendía en 2020 a 5.098.713, según datos de la Dirección General de Tráfico. De ellos, alrededor de dos millones se encuentran en la capital. Sin embargo, una amplia mayoría de los vehículos no se verán afectados por los cambios que contempla el proyecto de la nueva ordenanza.
A pesar de que las limitaciones más estrictas afectan especialmente a los vehículos sin etiqueta, que tendrán prohibida la circulación en el término municipal a partir de 2025 (tal y como contemplaba el plan de la anterior corporación), otras restricciones se han flexibilizado.
Los vehículos con etiqueta B y C podrán circular por las ZBEDEP para estacionar en aparcamientos públicos o privados, para llevar y recoger a niños de guarderías, colegios o institutos. Además, los residentes y comerciantes cuyos vehículos posean estos distintivos, podrán circular libremente.
Entre las propuestas de la nueva ordenanza, además, se incluye la ampliación del horario de circulación de motocicletas hasta las 23 horas, es decir, una hora más de lo previsto en la anterior normativa.
¿Saldrá el proyecto adelante?
El pleno del Ayuntamiento de Madrid votará la nueva ordenanza de movilidad el próximo 10 de septiembre. Aunque Partido Popular y Ciudadanos, socios de gobierno, respaldarán la propuesta, PSOE y Más Madrid han anunciado su intención de votar en contra, algo que también baraja VOX, cuyos dirigentes han declarado que no aprobarán la propuesta.
Ante la falta de apoyos en otras fuerzas, el Ejecutivo local deberá obtener los cuatro votos pertenecientes a los concejales de Recupera Madrid, la formación encuadrada en el grupo mixto y compuesta por los exediles carmenistas que se escindieron de Más Madrid el pasado mes de marzo.
Sin embargo, para que el proyecto cuente con la aprobación de los antiguos concejales de Más Madrid, serán necesarias ciertas condiciones, tal como aseguraba en declaraciones a la SER uno de sus miembros, José Manuel Calvo. "La ordenanza tendrá nuestro apoyo siempre que se den dos condiciones: que se mantenga Madrid Central en los mismos términos y condiciones que se acordaron durante el gobierno de Manuela Carmena y, por otro lado, que se incorporen las medidas necesarias para que la ordenanza esté a la altura de los retos que tiene la capital", afirmaba Calvo.
Agustín Rodríguez-Sahagún
Graduado en Derecho por la Universidad Pontificia de Comillas. Máster de Periodismo UAM-El País. Redactor...