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Esta apuesta por el Corredor Ferroviario Central alargará durante décadas el aislamiento histórico de Granada

El Ministerio de Transportes encarga el proyecto para convertir en corredor entre Algecitas, Córdoba y Zaragoza como una gran autopista ferroviaria mientras la ausencia de planes para el Corredor Mediterráneo entre Antequera, Granada y Almería abre un profundo agujero en la zona oriental de Andalucía

Mapa de la futura Autopista Ferroviaria entre Algeciras, Córdoba, Madrid y Zaragoza / ADIF

Granada

Granada se ha convertido, de facto, en la nada más absoluta para las comunicaciones ferroviarias entre el sur peninsular y el resto de España y Europa. En encargo de ADIF del proyecto para adaptar la vía Algeciras-Córdoba-Zaragoza para convertirla en autopista ferroviaria, supone en la práctica hacer innecesario el Corredor Mediterráneo por Granada.

La decisión de los sucesivos gobiernos, de uno y otro color, de que la doble vía solo llegue hasta Almería (entre Murcia y esta ciudad se construye solo en algunos tramos); la decisión de ADIF, confirmada oficialmente por la empresa a Radio Granada, de adaptar el trazado Granada-Almería al ancho internacional sobre la actual plataforma y con una sola vía; y el insalvable (a corto plazo) escollo que supone ahora Loja (y sus 27 km de trazado tradicional) para la línea de alta velocidad entre Antequera y Granada confirma el agujero negro en el que se convierte Granada desde el punto de vista ferroviario.

Aunque los planes del Corredor Mediterráneo, en teoría, no cambian, en la práctica, ADIF, el Ministerio de Transportes y el Gobierno pasan a apostar decididamente por el Corredor Central para dar salida a las mercancías desde Algeciras.

Precisamente de Algeciras parte el Corredor Mediterráneo hasta Almería pasando por Granada pero el tramo Antequera-Granada-Almería supone un escollo tan importante que en la práctica la apuesta por el Corredor Central como autopista para la salida de mercancías desde Algeciras ahonda la marginación ferroviaria del sureste peninsular.

El agujero del sureste peninsular

Aunque en teoría el encargo de ADIF sobre la 'autopista ferroviaria' por Madrid y Zaragoza no tiene por qué afectar a los planes futuros para el Corredor Mediterráneo por Granada, la decisión supone en la práctica una estocada para las mercancías en Andalucía Oriental.

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Granada, por la vía de los hechos, está muy cerca de quedarse aislada del mapa de mercancías del sureste de la península tras confirmarse la lentitud de todas las actuaciones entre Antequera y Granada, adelantada por Radio Granada, y confirmarse ahora la licitación por más de siete millones de euros de dos contratos para la adecuación del gálibo en el trayecto entre Algeciras, Córdoba y Zaragoza para el futuro tráfico de mercancías de esta llamada "Autopista Ferroviaria".

Por esta línea, trenes especiales transportarán a bordo camiones completos y de ahí que sea necesario más espacio a ambos lados de la vía y para esto hay que hacer tareas de adaptación del gálibo especialmente en túneles y viaductos. Este proyecto quiere decir que el transporte de Algeciras llegará a Madrid y a Barcelona a través de Córdoba, y que el Corredor Central gana la partida.

Granada se queda en una posición muy delicada porque este punto ya no será necesario, ni para el tráfico desde Algeciras ni tampoco para el de Almería, dado que este último saldrá por el Levante. Este proyecto del Corredor Central es clave para que Córdoba se convierta en un nudo logístico de primer orden en el sur de la Península.

 
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