Chanel Terrero hizo historia en Eurovisión 2022 al quedar tercera. Hacía 27 años que España no quedaba en esa posición y gracias a la artista cubana afincada en Cataluña y su «SloMo», miles de personas recuperaron la ilusión. La cantante de 31 años consiguió 459 puntos, solo detrás de Reino Unido y Ucrania que fue el ganador de la noche con la canción «Stefania». No pasaron ni 24 horas y Chanel ya estaba de vuelta y actuando en la plaza Mayor de Madrid en un evento organizado por Los 40 Classic. La acogida de la cantante fue espectacular: cientos de personas la recibieron a su llegada en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas y la acompañaron hasta el centro de la capital para verla brillar de nuevo. Sin embargo, no pasó desapercibido un detalle de la artista y muchos se preguntaron por qué no se quitó las gafas de sol en ningún momento. Primero lucía unas enormes gafas negras con diamantes en la montura y después optó por otras más pequeñas para subir al escenario. La artista de origen cubano quiso explicar el motivo y pedir perdón públicamente: «Perdonadme que lleve gafas porque de tanto llorar tengo conjuntivitis», explicó a los miles de asistentes a la plaza Mayor. Y es que después de tantas horas sin parar, la falta de sueño, el cansancio acumulado y el mar de lágrimas que lloró durante la noche eurovisiva, tuvo que proteger sus ojos. Asimismo, tampoco realizó la coreografía que acompaña a la canción de «SloMo» por falta de espacio. A pesar de que ya había acordado bailar todo el número junto a sus bailarines, el escenario no estaba preparado ni era lo suficientemente grande para permitir realizar todos los movimientos de la coreo. No obstante, ni las gafas de sol ni la falta de baile impidió a los fans disfrutar de la pedazo de actuación de Chanel a su vuelta de Turín, donde apenas 24 horas antes, conquistó a toda Europa con sus movimientos de cadera y su potente voz.