Cumbre de la OTAN en Madrid: cortes de tráfico y carreteras, zonas y calles afectadas y restricciones

Llega a Madrid la cumbre de la OTAN. Entre los días 28 y 30 de junio la capital española acoge la trigésima cumbre de la OTAN. Es la segunda vez que la ciudad organiza estas jornadas, tras hacerlo en 1997, pero el contexto internacional, con la guerra de Ucrania todavía activa, la convierte en una de las más importantes —si no la que más— en lo que va de siglo XXI. Todos los ojos estarán puestos en los presidentes y primeros ministros que se reunirán en Madrid, por lo que el Gobierno ha preparado un plan de la mano de Ayuntamiento y Comunidad para que no surjan contratiempos y todo marche según lo previsto. Las medidas de seguridad más restrictivas comenzaron este martes coincidiendo con la llegada de la mayoría de las delegaciones de los ejecutivos que participan en la cumbre. En total, se han desplazado a Madrid 5.000 integrantes de las delegaciones internacionales por medio del aeropuerto de Adolfo Suárez-Barajas y la base militar de Torrejón. Aun así, las reuniones más importantes de esta cita internacional tendrán lugar este miércoles y jueves. Para la ciudadanía madrileña, que se verá inevitablemente afectada por los cortes de carreteras y espacios públicos que se producirán en diversos puntos de la ciudad, se han lanzado una serie de recomendaciones y se han tomado varias medidas con el objetivo de que estén prevenidos sobre los «puntos calientes» de la capital. Además, hay un dispositivo policial de 10.000 agentes preparado para llevar a cabo todas estas restricciones. Ante este escenario, la rutina de los ciudadanos madrileños se verá notablemente afectada, ya que se crearán perímetros de seguridad en torno a los hoteles, museos y edificios en los que se congreguen los participantes internacionales. Los cercos estarán entre los 300 y los 500 metros a la redonda y obligarán a retirar a los ciudadanos sus vehículos aparcados. En caso contrario, serán retirados por las grúas municipales. Los hoteles que tendrán una mayor vigilancia serán el Rosewood Villamagna, el Palace, el Ritz, el Wellington, el Único y el Four Seasons, todos ellos situados en la zona centro de la capital. Al mismo tiempo, se verán afectados todos los accesos al Ifema y sus alrededores, repercutiendo en numerosas empresas que tienen su sede en los alrededores. Por otro lado, los desplazamientos de los diversos representantes políticos entre la ciudad afectarán a numerosas calles y carreteras, que sufrirán constantes cortes de tráfico a lo largo de los tres días de cumbre, aunque oficialmente sean solo dos. Las interrupciones afectarán al Paseo de la Castellana, Gran Vía, Paseo de Recoletos, Avenida de América, la plaza de Colón, Goya, la glorieta de Ruiz Jiménez y de Bilbao, la carretera de Barcelona (A2) y la M-11, según informa la web de Turismo Madrid. La circulación en estas zonas se verá alterada entre las 09:00 y las 10:00 horas y entre las 17:00 y las 18:00 horas. Además, el transporte público también sufrirá cortes. La estación de Metro de Feria de Madrid, correspondiente a Ifema, estará cerrada 28, 29 y 30 de junio (los trenes de la Línea 8 seguirán circulando desde y hacia el Aeropuerto de Barajas, pero sin detenerse en la parada). Además, Metro de Madrid reforzará las líneas 1, 5, 6 y 10 y podría hacerlo también en las líneas 4 y 9 según la demanda. En cuanto a los autobuses, habrá una lanzadera sin paradas intermedias desde la estación de Mar de Cristal hasta la puerta Norte de Ifema, con un horario que irá desde las 9:00 hasta las 22:00 horas, a excepción del día 29, cuya línea estará operativa durante las 24 horas. Un total de 40 países han desplazado sus delegaciones hasta Madrid con el motivo de una cumbre que, en palabras del secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, «será transformadora» y se produce en un momento «crucial». Además, el encuentro coincide con el cuadragésimo aniversario de la adhesión de España a la OTAN. En lo que respecta a la agenda política, el presidente Pedro Sánchez comenzó el martes manteniendo, en el marco de visitas oficiales, encuentros bilaterales en Moncloa con el primer ministro de Australia, Anthony Albanese, y después, por separado, con su homóloga neozelandesa, Jacinda Ardern. Posteriormente, el «plato fuerte» del día fue un almuerzo con Stoltenberg, en el que hablaron sobre la posible anexión de Suecia y Finlandia a la Alianza, para después reunirse con el presidente de EEUU, Joe Biden. Por último, se reunió con la primera ministra de Islandia, Katrín Jakobsdóttir, para después concluir la jornada con una cena en el Palacio Real con todas las delegaciones. En cuanto al miércoles 29, la agenda comenzará con un breve paso por el Real Instituto Elcano, en la calle príncipe Vergara, para después dirirgirse hasta Ifema y así dar comienzo a la primera sesión de la cumbre, que abordará la situación por la guerra de Ucrania y en la que participará su presidente, Volodomír Zelenski, por videoconferencia. Tras una pausa para el almuerzo, entrarán en escena los responsables de la UE, Charles Michel y Ursula Von der Leyen, así como Suecia y Finlandia, que esperan resolver su adhesión. Por último, la jornada concluirá con una cena euroatlántica en el Museo del Prado, que incluirá a todos los aliados, todos los Estados Miembro de la UE que no pertenecen a la OTAN (Suecia, Finlandia, Irlanda, Austria, Malta y Chipre), además de Michel y Von der Leyen. Para el jueves 30, última jornada de la cumbre, el día comenzará con la sesión dedicada a la vecindad sur de la OTAN y las posibles amenazas que se plantean. Posteriormente, Stoltenberg ofrecerá una rueda de prensa para hacer balance y valorar las reuniones mantenidas entre las altas esferas de los países. La principal incógnita es qué sucederá con Suecia y Finlandia, la Turquía de Erdogan se mantiene reticente a su integración en la OTAN, a pesar de los últimos esfuerzos de la Alianza de acercar posturas. En paralelo a estos eventos, se producirán también varias reuniones entre algunos de los representantes de los países, como es el caso de una cena conjunta entre todos los ministros de Defensa y Exteriores. Además, tendrán lugar diversos encuentros en la Casa Real, donde los reyes recibirán a los invitados, así como visitas a La Granja de San Ildelfonso o el Museo Reina Sofía. La seguridad es la principal preocupación de las autoridades españolas y buscan evitar a toda costa cualquier injerencia extranjera o nacional en el evento. Para ello, se han diseñado dos planes paralelos, uno desde el Ministerio de Defensa, que coordina al Ejército, y otra desde el Ministerio del Interior, responsable de la Policía y la Guardia Civil. En relación al dispositivo de seguridad que ha preparado Defensa, con el objetivo de blindar el cielo de Madrid ante posibles injerencias sobre todo de drones, va a contar con una unidad de Mando de Artilleria Antiarea del Ejército de Tierra y los cazas de combate del Ejército del Aire, que estarán preparados para despegar ante cualquier amenaza. Además, se va a instalar el Mando Operativo Aeroespacial, que es un órgano dependiente del Mando de Operaciones y se establecerá un puesto de mando que controlará y vigilará el espacio aéreo con todos los recursos que se van a desplegar. El Ejército del Aire proporcionará sus cazas de combate y el Cuartel General del Mando de Artilleria Antiaérea del Ejército de Tierra va a proporcionar una unidad que brindará apoyo defensivo ante injerencias. La Alianza Atlántica también va a participar con aviones de control y vigilancia aerea AWACS, que a través de sensores permiten la detección temprana de cualquier elemento en el espacio. Por su parte, desde el Ministerio del Interior han planeado desplegar un dispositivo de seguridad que han apodado «Eirene» (nombre griego que se traduce como la que trae la paz). Este contará con 6.550 policías nacionales y 2.400 guardias civiles que se encargarán de evitar cualquier tipo de desorden público o atentado terrorista. De ese total, 2.300 agentes son miembros de las Unidades de Intervención Policial (UIP) conocidos como antidisturbios. Pertenecen a 47 grupos y vienen de diferentes puntos de España. Además, en ambos cuerpos están desplegadas las diferentes unidades de cada cuerpo: Información, Seguridad Ciudadana, Subsuelo, Unidad Canina y Tedax. El despliegue se completa con policía municipal, agentes del CNI, seguridad de Casa Real, seguridad de Presidencia y escoltas de altos cargos y de cada delegación. Ante el alto número de restricciones y dispositivos de seguridad, tanto desde el Ayuntamiento de Madrid como desde la Delegación de Gobierno han lanzado una serie de recomendaciones para evitar inconvenientes de última hora. En primer lugar, invitan a las empresas a promocionar el teletrabajo en estas fechas, para reducir así el tráfico. Además, consideran que los movimientos por la ciudad pueden ser complicados en determinadas zonas, por lo que señalan que los ciudadanos deberían restringir sus desplazamientos. «La OTAN no es un evento cualquiera, el centro estará prácticamente bloqueado. Muchos trabajadores del centro estarán teletrabajando y recomiendo que no vayan al Centro esos días», indicó la vicealcaldesa Begoña Villacís. Para los que decidan moverse por Madrid, otra de las recomendaciones es la del uso del transporte público, que además el autobús será gratis los días 28, 29 y 30 de junio durante la celebración de la cumbre de la OTAN. «Pondremos la EMT gratuita esos días, recomendando usar el Metro para garantizar condiciones de movilidad en Madrid» que «será una ciudad bloqueada entre el 28 y el 30 de junio», ha asegurado el alcalde Martínez-Almeida.

Cumbre de la OTAN en Madrid: cortes de tráfico y carreteras, zonas y calles afectadas y restricciones

El encuentro entre los líderes de 40 países en la capital viene acompañado de fuertes cortes de tráfico en zonas céntricas y las inmediaciones de Ifema

Carlos de Barrón

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