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"¿No se puede o qué?": el feo gesto de un comensal de 'First Dates' hacia su pareja deriva en una de las citas más bochornosas

Francisco reconocía desde el primer momento que María no le había gustado nada

Francisco y Carmen durante su cita de 'First Dates'. / First Dates

Madrid

Carmen acudía hace unos días al restaurante de First Dates con el objetivo de encontrar el amor verdadero "de una vez por todas". En la entrada le esperaba Lidia Torrent, a quien le explicaba que era una persona muy extrovertida y simpática que se amolda a cualquier situación. Sin embargo, no estaba preparada para lo que viviría minutos más tarde. Después de explicarle a Torrent que buscaba a alguien que se implicara con ella y que la mimase, el equipo del programa decidía emparejarla con Francisco. Pero el sevillano tenía claro que Carmen no era para él.

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Nada más ver a María, el comensal se sinceraba frente a las cámaras del programa y reconocía que no le había gustado nada: "¡Madre mía!, ¡tierra trágame! La primera impresión me llena o no me llena, me transmite o no". Después de explicar que se fía mucho de la primera impresión a la hora de determinar si una mujer le gusta o no, Francisco reconocía que Carmen no le había entrado por los ojos y que, por consiguiente, no veía un futuro junto a ella: "No es que sea ni guapa ni fea, es normal y la manera de hablar no me ha gustado. Se ve que es buena mujer, pero no ha saltado la chispa. No me atrae sexualmente ni nada".

"La chica de al lado me gusta más"

Por otro lado, Carmen aseguraba tras bastidores que Francisco le había gustado bastante: "Me ha parecido un hombre muy atractivo y apuesto, me ha gustado". Por esa misma razón, y a pesar de que a Francisco no le había entrado por los ojos, ambos se sentaron a cenar a buscar posibles cosas en común. A pesar de que la cartagenera hizo todo lo posible para mantener una conversación de lo más amable, Francisco se mostró en todo momento introvertido e incluso distraído. Algo que no le gustaba nada a Carmen, quien se daba cuenta a medida que avanzaba la cita que Francisco no era para ella: "No me ha transmitido".

Unas diferencias que se hacían todavía más grandes en cuanto Francisco descubrió en una de las mesas del restaurante a una chica que le había gustado mucho más que Carmen. A partir de ese preciso instante, el sevillano no pudo dejar de mirar hacia ella hasta el punto de pasar por completo de su actual cita. Dado que Francisco no le contaba nada, Carmen se interesaba por él y le preguntaba cómo lo estaba pasando. A pesar de que el sevillano le respondía que estupendamente, se le veía fuera de la cita. Algo que confirmaría posteriormente tras bastidores, donde explicaría que le gustaba más la chica de la mesa que tenía al lado: "La chica de al lado me ha parecido más guapa y más afín a mí".

"¿No se puede mirar o qué?": el feo gesto de un comensal con su cita

A pesar de que se pasó toda la cita mirando hacia la otra chica, Carmen no perdió los nervios y ningún momento y le explicó, de la manera más asertiva posible, que podía contarle lo que fuera: "Puedes ser sincero conmigo. Tú lo que pienses sobre mí, yo lo acepto". Pero Francisco estaba a otras cosas. En declaraciones a las cámaras del programa, el sevillano reconocía que no iba a volver a mirar a la otra chica porque estaba feo. Sin embargo, no podía parar de mirar en esa dirección.

Dado que no le contaba nada, Carmen acabó definiendo la cita de aburrida. Y es que, a pesar de que intentaba sacar conversación constantemente, Francisco no estaba por la labor. De hecho, y después de verificar que Carmen sabía lo que estaba sucediendo, este trataba de justificarse de la peor manera posible: "¿No se puede mirar o qué?". De esta manera, y dado que no hubo ningún tipo de complicidad a lo largo de la cita, cada uno acabó marchándose por su sitio.

David Justo

(Astrabudua, 1991) Periodista especializado en...