¿Sodoma y Gomorra?
Podemos ahorrar en luz y estar todos de acuerdo en algo, pero nadie nos quita el gusto por dilapidar en ruido
¿Sodoma y Gomorra? La crónica de José Luis Sastre
Se han apagado los escaparates, o la mayoría de los escaparates, y esto no ha sido Sodoma y Gomorra. Como todo el mundo estaba de acuerdo en que había que ahorrar energía, se ha formado un embrollo formidable que se resume en que: el PP se opone al decreto con medidas que pedía el PP, como limitar el aire acondicionado.
El Gobierno avisa a las comunidades, que se quejan de falta de medios, de que tendrán que ser ellas, con esos medios que les faltan, las que vigilen que se aplican unas medidas que no consensuó con ellas porque, a decir de la ministra Ribera, se les echó el tiempo encima.
Sostiene el PP que habrá más oscuridad, aunque esta noche se veía todo con la misma luz en la calle: porque el alumbrado no se toca. También dice que todos tendrán que poner la misma temperatura aunque eso no lo pone en el decreto. Madrid amagó con la insumisión, pero no. Amagó con ir al Constitucional, pero de momento tampoco. De momento, se lo plantea. El PP se plantea ir al Constitucional a la vez que el PP no se lo plantea. Basta con escuchar a Juanma Moreno.
Ha dicho el Gobierno que darán un poco de margen a las tiendas, que entiende que hoy no haya inspectores con termómetros por los sitios. Pero como vea que una comunidad incumple acudirá al mismo sitio que Ayuso, al Constitucional, que, por cierto y por supuesto, tiene bloqueada su renovación, aunque esa es otra historia. Europa pide ahorro, von der Leyen dice que el ahorro es seguridad y no parece que nadie se oponga al ahorro. Pero así estamos y no porque sea agosto: porque podemos ahorrar en luz y estar todos de acuerdo en algo, pero nadie nos quita el gusto por dilapidar en ruido.