Sandro Rosell comparte el miedo que pasó en prisión: "Acuchillaron a uno por una Coca-Cola"

Sandro Rosell alcanzó la presidencia del FC Barcelona en 2010 y con él en el palco el conjunto blaugrana vivió algunos de los mejores años deportivos de su historia. Sin embargo, dimitió en 2014 tras la polémica surgida por el 'Caso Neymar' por el fichaje del brasileño por el Barça. El pasado mes de diciembre, la Audiencia de Barcelona absolvió a Neymar, a sus padres, los expresidentes del Barça y Santos, a los dos clubes y a la empresa N&N. Pero entre todos esos años, la vida de Rosell cambió drásticamente para siempre.

Concretamente, lo hizo en 2017, cuando fue encarcelado. Pasó 21 meses en prisión preventiva hasta que fue absuelto por la Audiencia Nacional de los delitos de los que le acusaban. Desde su salida de prisión, Rosell ha escrito un libro y ha contado su odisea en numerosas ocasiones.

La última de ellas fue este martes en el programa dirigido por Risto Mejide, Viajando con Chester. En él, Mejide contó que al entrar Sandro Rosell en prisión le dieron una caja de preservativos y un bote de vaselina y qué el respondió que para qué. "¿Descubriste para qué?", preguntó el presentador al expresidente blaugrana, seguidamente. "Sí, sí, sí, sí. Hay mucha relación homosexual en la cárcel, mucha, pero incluso de gente que no es homosexual", contestó Rosell.

Amenazas y miedo

Rosell admitió que lo pasó mal en la cárcel y que sintió miedo de sufrir violencia física: "Me amenazaron un par de veces, pero enseguida los compañeros salieron en mi defensa. Me iban a dar de hostias dos. Uno por ser presidente del Barça y otro por ser catalán. Me pasó una vez en Madrid y otra en Barcelona, pero las dos veces fui protegido sin que lo pidiera". "Uno me dijo que le pagaba todo lo que me pidiera hasta que quisiera o me reventaba, pero salieron mis compañeros y lo frenaron", declaró.

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"En Barcelona me hice muy amigo de un jefe gitano que era muy del Barça. Ahí el que me amenazó fue un gitano, entonces el jefe le dijo cuatro cosas y se paró todo; en Soto del Real (Madrid), los presos colombianos fueron los que más me defendieron (...) Aquellos días te acojonas. Uno le clavó un palo astillado a otro porque le debía una Coca-Cola", recordó.

"No recordaba haber llorado y allí lo hice varias veces"

A lo largo de la entrevista, Rosell rememoró varios de sus momentos más duros durante esos 21 meses y compartió con los espectadores sus vivencias. "La cárcel es gris y un poco rancia, pero a la vez descubres mucha humanidad, es un contraste constante de emociones, de colores, de tristezas, de risas incluso. Yo siempre he intentado ser muy cerebral, yo no recordaba haber llorado en toda mi vida y allí lloré varias veces y a moco tendido, después me encontraba mejor", aseguró.

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Su detención

Como ya había declarado en varias ocasiones, el catalán insistió en que colocaron en su casa un sobre de 5.000 euros. Así narró el fatídico 23 de mayo de 2017 en el que fue detenido: "Vienen muchísimos policías, 20 o 30, con una orden judicial, para detenerme por unos casos de una empresa mía de hace 12 años en Brasil y yo alucino. Nos llevan al cuartelillo y de ahí para Madri. En el registro sacaron un dinero de un sobre, en total 5.000 euros. Les digo que no es mío, al policía le digo que el dinero me lo ha puesto alguien de los que estaban ahí. Enseguida pensé que pintaba mal, que había una persecución seria".