Por qué deberíamos comer más con palillos
Me fascinaban aquellos ejemplares momificados de arroz tres delicias, cerdo agridulce o tallarines con gambas
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/7FWYWIW3NZFQ3EW5YCC4TJFHHI.jpg?auth=a214177b77eb6daf8589a153e7c4c5a2144fa6e1a0fc528121dd2fbd425ae8bc&quality=70&width=650&height=487&smart=true)
Comiendo con palillos en el Año Nuevo chino. / EDWIN TAN
![Comiendo con palillos en el Año Nuevo chino.](https://cadenaser.com/resizer/v2/7FWYWIW3NZFQ3EW5YCC4TJFHHI.jpg?auth=a214177b77eb6daf8589a153e7c4c5a2144fa6e1a0fc528121dd2fbd425ae8bc)
Madrid
Cuando yo era niña, en los años 60 del siglo pasado, apenas había dos o tres restaurantes chinos en todo Madrid. Uno de ellos estaba cerca de casa y tenía un pequeño escaparate en el que se exponían platos de comida plastificados, cubiertos de una extraña película gelatinosa y acompañados de pequeños rótulos que los identificaban. Me fascinaban aquellos ejemplares momificados de arroz tres delicias, cerdo agridulce o tallarines con gambas. Cada vez que pasábamos por delante, me quedaba un buen rato mirándolos.
Más información
Mis padres me explicaban que los chinos comían con palillos y yo me los imaginaba tomando aquellos platos con los mismos palillos que nosotros usábamos en los bares para pinchar las aceitunas o los boquerones en vinagre.
En los años 70 empezamos a frecuentar los restaurantes chinos, cada vez más abundantes. Pero no sabíamos usar los palillos y comíamos con tenedor, embaulándonos la comida a paletadas en las que se mezclaban y confundían las diferentes texturas y sabores.
!["No he visto un pangolín en mi vida": el divertido repaso de Mad4Yu a los mitos y realidades de la comida china](https://cadenaser.com/resizer/v2/3QHTF6NUYFA2LMNSU6OAVPQWGY.jpg?auth=0dffb5b3c7be25f88a6ec0453c7bf4140df112d21b4169d2113f318ab0ba91d5&quality=70&width=360&height=202&smart=true)
Hasta los años 80 no aprendimos a utilizar palillos para comer la comida oriental, que por entonces no era ya solo china: habían abierto también restaurantes japoneses y tailandeses.
Empezamos así a comer de otra manera: más despacio, poco a poco, tomando cada pedazo de comida de por separado, de una forma que nos permitía apreciar los distintos sabores y texturas que componían cada plato. Nos dimos cuenta entonces de que comer con palillos no era algo exótico y raro, sino una forma más sabia, pausada y exquisita de alimentarse.
![Paloma Díaz-Mas | Comer con palillos](https://cadenaser.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fsdmedia.playser.cadenaser.com%2Fplayser%2Fimage%2F20236%2F22%2F1687435617081_1687435998_asset_still.jpeg?auth=81ec15470bf4971ad9dc4b66c00a4c3dccef1400ae61384202c91cb2d94f3892&quality=70&width=655&height=368&smart=true)
Paloma Díaz-Mas | Comer con palillos
02:31
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
![](https://sdmedia.playser.cadenaser.com/playser/image/20236/14/1686757396117_1686757477_asset_still.jpeg)