"No les voy a llamar secta, pero...": la divertida respuesta de Berto Romero a una consulta sobre electrodomésticos
Con Andreu Buenafuente como invitado especial, ambos han acabado emulando a Sergio Dalma
Madrid
A los humoristas les encanta hablar de modas gastronómicas porque, con un par de comentarios sarcásticos, son capaces de desmontar lo que mucha ha acabado sin pensar demasiado, casi por imitación. Una estrategia que, esta semana, Berto Romero ha aplicado refiriéndose al último gran éxito de la sección de electrodomésticos: la freidora de aire o airfryer.
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Pero el humorista catalán, que acaba de estrenar la segunda temporada de El Consultorio de Berto en Movistar+, no es el primero que consigue carcajadas apelando a cómo nos alimentamos. Leo Harlem, por ejemplo, no soporta los platos de pizarra. Un filón muy explotado también en los vídeos de Pantomima Full, que ya han ridiculizado a los cocineros intensos, a los empresarios canallitas y también a casi todas las subespecies del foodie: los amantes del vino, del café de especialidad, de Mercadona, de la comida healthy, del gin-tonic, del pan de masa madre...
La pregunta, en este caso, ya había centrado el tema: "Tengo un amigo se ha comprado una airfryer y está todo el puto día hablando de las maravillas del trasto de los cojones. Que si cocina esto, que si cocina lo otro... Vamos, que parece un puto comercial de la mierda de la airfryer. ¿Qué hago, me compro una?".
Gente que da la turra
Al contar con su amigo Andreu Buenafuente como invitado especial, Berto Romero le ha preguntado si él también tenía una... y su pareja en Nadie Sabe Nada ha reconocido que sí y que, además, la usa. "¡Ah! ¿Eres de esos?", le ha respondido.
"A la peña de la airfryer no le voy a llamar secta, porque no, pero culto, ¡sí! Y yo creo que son los mismos que los de la Thermomix, que se han reconvertido y aún tenían ganas de dar turra", ha asegurado entre risas.
"Además airfryer suena a La Hora Chanante", ha añadido, imitando a Joaquín Reyes. "El nombre está mal puesto y mi opinión es que no le llamen freír. Ya nos comimos la mierda de freír con mantequilla y no salió bien. Tal y como lo veo yo, freír con aire no es freír".
Después de que ambos se pusieran a cantar "freír con aire no es freír" —siguiendo la melodía de la canción Bailar pegados, de Sergio Dalma—, Berto Romero ha insistido en que "freír con agua es hervir" y ha compartido un consejo para quienes quieran disfrutar de un frito de verdad: "Dilo con la boca llena. ¡Quiero comer frito! ¡Quiero sabor a aceite, a colesterol y a culpabilidad!".
Como suele pasar en muchos de sus gags, de todas formas, al final ha sorprendido a todo el mundo. "La verdad es que la airfryer tiene ventajas. No salpica, por ejemplo. Yo he llegado a freír calamares desde el váter porque me da miedo... Pero no huele y es fácil de limpiar... ¿Cuánto vale un trasto de esos?".
Carlos G. Cano
Periodista de Barcelona especializado en gastronomía...