La octava planta
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Las otras comedias de Almodóvar

El director manchego, después de una etapa muy negra y dramática, vuelve al género que le dio la fama y estrena 'Los amantes pasajeros'

Una escena de 'Entre Tinieblas'

Dicen que uno se ríe con más ganas si los ojos están ya secos de tanta lágrima, que la risa es por lo general directamente proporcional a los kleenex que se acumulan en la mesilla. Complejidades de la psicología humana. Después de muchos años enredado en los recovecos más catárticos y oscuros del drama, Pedro Almodóvar se reconcilia con la carcajada. El director manchego vuelve a la comedia loca, ese género con el que debutó allá por los 80 y que le encumbró a los altares del cine nacional e internacional.

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Han pasado exactamente 33 años desde que un ordenanza de Telefónica llamado Pedro Almodóvar decidiese, en sus ratos libres, dar forma a sus sueños cinematográficos. Su primera comedia, que es también su primer largo serio, nació gracias a los irrisorios 3.000 euros (500.000 de las antiguas pesetas) que entonces le prestaron sus amigos. En 'Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón', el manchego hizo un precario y cutre retrato de la movida madrileña a través de la vida de tres amigas: Carmen Maura, Alaska y Eva Siva. Mítica es la escena en la que una jovencísima Alaska se hace pis encima de Siva. El presupuesto era tan ajustado y la producción tan sumamente artesanal que muchas escenas se tuvieron que rodar en la propia casa de la cantante porque, encima, ni tenían permisos para rodar en la calle.

Muchas de las películas de Almodóvar transitan entre la comedia y el drama. Por eso a veces resulta difícil clasificarlas. Este reportaje se ciñe exclusivamente a las comedias disparatas y excéntricas que no comparten nacionalidad. En 1983, Almodóvar se propone escandalizar a la mojigata España de entonces y se atreve a liberar (como después hará también en 'La mala educación') su enconado resquemor con la Iglesia. 'Entre Tinieblas' es la historia de un convento en el que más que rezo, recogimiento y pastas hay drogas duras, sexo, hijos naturales, misterios y asesinatos. Vuelve a contar con Carmen Maura, su primera actriz fetiche, y se estrena con Marisa Paredes y Chus Lampreave en los papeles de las demenciales e irreverentes sor Perdida, sor Estiércol y sor Rata de Callejón. Meteorito moral para el postfranquismo.

Al año siguiente, el director decidió seguir metiendo el dedo en la yaga de la España más atrasada y mísera. '¿Qué he hecho yo para merecer esto?' es su comedia más social o, como él mismo la definió, el "retrato de la feminidad de extrarradio". Su por entonces inseparable Carmen Maura encarnó a una ama de casa que, a golpe de tranquilizantes, se empeña en estructurar una familia ya de por sí rota, con un marido cavernícola y unos hijos que o bien son chaperos o bien traficantes de drogas.

Aunque a mediados de los 80 Almodóvar ya era un director medianamente respetado, fue en 1988 cuando el mundo del cine empezó a hacerle la ola. 'Mujeres al borde de un ataque de nervios' fue un verdadero bombazo en taquilla con más de tres millones de espectadores. Sus histéricas y coloridas mujeres, con Maura una vez más como cabeza de cartel, se llevaron 5 premios Goya y fueron candidatas al Oscar como mejor película extranjera. Con esta "alta comedia" es cuando se inicia el affaire entre el manchego y Hollywood. Algunos críticos piensan que ésta es la última gran comedia almodovariana antes de su etapa dramática y redentora. Aunque hay otros que no están del todo de acuerdo y que consideran que no se puede dejar de lado lo que fue uno de los episodios más grises de su carrera. En 1993 el director manchego se estrelló de bruces contra el suelo con 'Kika', la oveja negra de su filmografía, una extraña historia 'cómica' protagonizada por Verónica Forqué. La única alegría que le dio la película fue el Goya que se llevó la actriz.

Pero, por lo general, el que se cae y lo asume, se levanta con mucha más fuerza. Por eso, después de 'Kika' vinieron los grandes éxitos del manchego. Almodóvar se levantó a base de inspeccionar ese subconsciente negro que habita en todo ser humano. Le dio un portazo en las narices a la comedia y abrió con mucho éxito la puerta del drama. De hecho, Hollywood le volvió a hacer la reverencia con 'Todo sobre mi madre' y le dio, esta vez sí, el Oscar a la mejor película extranjera. Después vinieron las míticas 'Hable con ella', 'La mala educación', 'Volver', 'Los abrazos rotos' y 'La piel que habito'. Pero eso, ya saben, es otro artículo. Por lo que aquí respecta, expectación máxima en las salas ante el inminente estreno de 'Los amantes pasajeros'. ¿Habrá recuperado Almodóvar su capacidad para hacer reír? La respuesta: el viernes 8 de marzo.

 
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