“Occidente no se ocupó del ébola hasta que llegó a Europa y Norteamérica”

Madrid

Paciencia Melgar, la monja guineana que superó el ébola tras sufrir un contagio en un hospital de Liberia, tuvo que hacer frente al virus en un campo minado por la dolencia. El Gobierno de España había denegado su traslado a nuestro país, al contrario de como hacía con los religiosos españoles, ya que ella no era no compartía nuestra nacionalidad. "Si de mí dependiera, ya habría vuelto a Liberia a echar una mano", ha revelado la monja en Hoy por hoy, un año después de que el padre Miguel Pajares falleciera a manos del ébola.

"Sería como un sueño, si no fuera porque se han perdido muchas vidas por el camino", anota Melgar. La hermana Paciencia vincula la lucha contra este virus y la búsqueda de una vacuna a la aparición de casos de ébola en países de Occidente. La llegada del ébola a Norteamérica y a Europa, en voz de la religiosa, "ha supuesto un alivio" para el drama vivido en África: "No se tenía en cuenta que el ébola llevaba en África desde 1976 y que había matado a muchas personas. Hoy se conoce la existencia de esta enfermedad", apunta la religiosa.

Melgar, también recordada por su ausencia de rencor hacia el Gobierno español —que sí le concedió la nacionalidad cuando ya se encontraba sana—, anota que las equivocaciones "parten de la inconsciencia y no son extrañas en el ser humano". Sobrevivió a la enfermedad en unas dependencias en las que compartía baño con el resto de enfermos y dormitorio, asimismo, con una baja tras otra. Solo en un año, son más de 10.000 las muertes por ébola en todo el mundo.

Con todo, la religiosa se encuentra en Guinea Ecuatorial desde que abandonara nuestro país: "Depende de mis superiores, y aún no han decidido cuándo volvemos a Liberia para echar una mano". Esa mano es la que echó, también, cuando donó su plasma para producir parte del suero que recibió la sanitaria Teresa Romero. "Desgraciadamente, no pude hablar por teléfono con ella. Tampoco hemos podido vernos en persona", indica la guineana.