De 'Black Beach' a 'El Hoyo': los desayunos del actor Emilio Buale
Para dar espadazos y trepar como un loco hay que empezar el día con fuerza
Madrid
La Academia del Cine ha seleccionado tres películas como precandidatas españolas a los Óscar y una de ellas es El Hoyo, de Galder Gaztelu-Urrutia, un peliculón de bajo presupuesto y alto contenido gastronómico, social y filosófico que, sin que nadie lo esperara, se ha convertida en una de las grandes sorpresas del año.
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Uno de sus personajes más carismáticos —en este artículo no hay spoilers— lo interpreta el actor Emilio Buale y, aunque en la película no se respetan las cinco comidas al día que suelen recomendar los nutricionistas, sí hemos querido hablar con él de su relación con nuestro fetiche gastronómico: ¡el desayuno!
"Cuando estoy de gira de teatro suelo desayunar fuerte por la mañana para luego no llenarme a mediodía y sentirme ligero antes de la función, así que tiro de bol de frutos secos con semillas de chía, bayas y, a veces, también huevos con un poco de beicon... Durante el rodaje de El Hoyo hice algo parecido. El desayuno era la comida potente del día porque ya luego nos dedicábamos a dar espadazos, gritar, trepar por cuerdas y pasar las de Caín", explica.
El Hoyo se puede ver en Netflix, pero Emilio Buale también tiene una película en cartelera que, además, merece la pena ver en pantalla grande: Black Beach. Un thriller en el que los negocios y la corrupción política se mezclan con el día a día en África… ¡y sus desayunos!
"En Guinea es muy común la pepper soup, una sopa picante que suele llevar carne, pescado, verduras... ¡Ahí sí que se des-ayuna! Cuando sale el sol, la gente lleva 10 o 12 horas sin comer y necesita algo reconstituyente. En el arranque de la película, el personaje de Raúl Arévalo hace una entrega de dinero y documentos en un bar, y luego se siente en la barra y desayuna pepper soup. Un plato muy común en muchas zonas de África", explica.
Pero Emilio Buale tiene una vida más allá de los escenarios y el cine. ¡También es bombero! Y le encanta almorzar con sus compañeros al acabar la guardia. Aunque claro, puestos a elegir un desayuno inolvidable, recuerda la sensación del primero que se zampó —posiblemente, leche con galletas— con la tranquilidad de saber que había superado la oposición y que tenía buena parte de su vida ya resulta.
Claro que, como buen bombero, Emilio Buale está en forma y ha tenido que entrenar mucho, así que tiene muy clara la importancia de una buena alimentación. Por eso empieza cada día con fruta. Con una receta peculiar, eso sí, apta para niños y para perezosos: "Tengo un robot americano y suelo combinar tres piezas de temporada. La naranja casi siempre de base, y lo que encuentre. Melón, sandía"...
Carlos G. Cano
Periodista de Barcelona especializado en gastronomía y música. Responsable de 'Gastro SER' y parte del...