Bush apoya una enmienda constitucional para prohibir las bodas de gays
"Unos pocos jueces y autoridades locales se atreven a cambiar la institución fundamental de la civilización"
El presidente de EEUU, George Bush, anunció hoy que apoyará una enmienda constitucional para prohibir el matrimonio entre homosexuales. "Para prevenir que el significado del matrimonio cambie para siempre, nuestra nación debe aprobar una enmienda constitucional para proteger el matrimonio en Estados Unidos", dijo Bush, en una declaración en la Casa Blanca.
El presidente dijo que la medida es necesaria para detener los esfuerzos "agresivos" de "jueces activistas" y de autoridades locales para "redefinir" el matrimonio de forma que se permita la unión de personas del mismo sexo.
Más información
- El demócrata Kerry gana en Utah y Idaho y se afianza como rival de Bush
- El Supremo de California rechaza frenar de inmediato las bodas gays
- El alcalde de Seattle reconoce las bodas gay de sus funcionarios
- Los matrimonios gays continuarán en San Francisco
- Schwarzenegger pide al fiscal que frene los matrimonios homosexuales en San Francisco
- El fiscal tramitará la petición de Schwarzenegger de frenar las bodas gays
Bush criticó el dictamen de un tribunal de Massachusetts por permitir las bodas entre homosexuales a partir de mayo y la decisión del alcalde de San Francisco, Gavin Newsom, de emitir certificados de matrimonio para las parejas del mismo sexo.
Más de 3.000 parejas del mismo sexo se han casado en ese municipio californiano desde el pasado 12 de febrero, y un juez de la Corte Suprema local rehusó el viernes ordenar la suspensión de estas uniones, como habían pedido algunos grupos conservadores. "A menos que tomemos medidas, podemos esperar más decisiones arbitrarias", declaró Bush.
"EL CARÁCTER SAGRADO DEL MATRIMONIO"
"Tras más de dos siglos de jurisprudencia estadounidense y milenios de experiencia humana, unos pocos jueces y autoridades locales se atreven a cambiar la institución más fundamental de la civilización", afirmó.
En su discurso sobre el Estado de la Unión el mes pasado, Bush se comprometió a defender "el carácter sagrado del matrimonio", pero hasta ahora la Casa Blanca no había dado su apoyo a una modificación de la Constitución para prohibir las bodas de homosexuales, como le han instado los grupos conservadores estadounidenses.
No obstante, Bush se ha decantado por adoptar la posición más tradicional en un asunto que será prominente durante la campaña electoral que culminará en los comicios de noviembre.
El favorito a ganar la nominación del Partido Demócrata a la presidencia de EEUU, el senador John Kerry, que es del estado liberal de Massachusetts, apoya las uniones civiles entre homosexuales, pero no el matrimonio entre gays.
