El Presidente de Costa de Marfil pide el cese de los ataques a intereses franceses
En un mensaje televisado a la nación
El presidente de Costa de Marfil, Laurent Gbagbo, hizo un llamamiento a través de la televisión a la población para que mantenga la "calma" y pidió que terminen las manifestaciones contra intereses franceses que se han desarrollado en los últimos días.
El llamamiento fue hecho por Gbagbo en un mensaje transmitido anoche por televisión, el primero desde que el jueves pasado decidió romper la tregua que mantenían el Ejército y las ex rebeldes Fuerzas Nuevas desde hace más de un año.
Más información
- Los españoles residentes en Costa de Marfil piden ser evacuados
- La ONU aprueba el embargo de armas en Costa de Marfil
- Francia envía refuerzos a Costa de Marfil tras la muerte de nueve soldados en un ataque
- Costa de Marfil amenaza a Francia con una situación "peor que Vietnam"
- Nueve militares franceses mueren en un ataque de tropas gubernamentales marfileñas
"Exhorto de nuevo a la población para mantener la calma y pido a todos los manifestantes que regresen a casa", afirmó Gbagbo, que asumió el poder el 26 de octubre del 2000 tras una revuelta popular que depuso al presidente Robert Guei. En su mensaje, retransmitido por emisoras internacionales captadas en Dakar, el gobernante pidió también no "ceder a las provocaciones".
Miles de manifestantes de un grupo radical conocido como los "Jóvenes Patriotas" se lanzaron a la calle el fin de semana pasado para incendiar y saquear establecimientos franceses en esa nación, que fue una colonia de Francia hasta 1960. Las protestas se desarrollaron después de que tropas de paz francesas inutilizaran la Fuerza Aérea de Costa de Marfil como represalia por un ataque de aviones militares que mató a nueve soldados franceses y un civil estadounidense.
Gbagbo dijo que había decidido lanzar el jueves pasado un ataque contra las posiciones de las Fuerzas Nuevas, que ocupan la mitad norte del país, porque todas las posibilidades de diálogo habían quedado "exhaustas".
Desde hace casi dos años los dos bandos en disputa intentan ejecutar un plan de paz que permitió alcanzar el alto el fuego pero que también establecía una serie de reformas políticas que exigían las Fuerzas Nuevas para desarmarse.
Esas reformas fueron bloqueadas en el Parlamento, por lo que las Fuerzas Nuevas se negaron a desarmarse y desmovilizarse a partir del 15 de octubre pasado, y desde entonces se temía una reacción de fuerza de las tropas leales al presidente Gbagbo. En su mensaje, retransmitido por emisoras internacionales captadas en Dakar, el gobernante pidió también no "ceder a las provocaciones".




