Sociedad

Aralar dice que la mayoría de presos de ETA está a favor del abandono de las armas

PSE y PP dicen que la expulsión de 'Pakito' no es una buena señal sobre el fin de la violencia

El coordinador general de Aralar, Patxi Zabaleta, con motivo de la expulsión de ETA de Francisco Mújica Garmendia "Pakito" y otros cinco presos por pedir el abandono de las armas, ha mostrado su "convencimiento" de que esta reivindicación es "mayoritaria" entre el conjunto de reclusos de la banda terrorista. Tanto el PSE como el PP consideran que esta expulsión no es una buena señal sobre el fin de la violencia terrorista.

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El anuncio de que el histórico dirigente de ETA durante más de quince años y los presos Ignacio Aracama "Makario", Ignacio Bilbao "Iñaki Lemona", Carlos Almorza Arrieta, Kepa Solana Arrondo y Koldo Aparicio Benito han sido expulsados de ETA, ha generado hoy numerosas reacciones de las fuerzas políticas de Euskadi.

Zabaleta, quien filtró una carta de estos presos en los que abogaban por el abandono de las armas, señala que hay muchos miembros de la banda terrorista que abogan por dejar las armas. "El diálogo se basa en el respeto a la diversidad ideológica, y esa es también la idea que hemos perseguido en relación con los presos".

También se ha referido a esta expulsión el secretario general del PSE-EE en Vizcaya, José Antonio Pastor, quien en declaraciones a la Cadena SER lamentaba la noticia "pues demuestra una contradicción flagrante" con "el discurso oficial" de Batasuna de apuesta por las vías políticas.

Desde el PP, el presidente del partido en Cataluña, Josep Piqué, han calificado "lamentable" que desde la dirección de ETA "siempre se defienda la continuidad de la violencia" y asegura que con la política antiterrorista que está desarrollando el Gobierno de Zapatero "se está favoreciendo que ETA marque los tiempos".

Intento de asegurar la cohesión interna de ETA

La expulsión se produce después de que se filtrara el pasado noviembre una carta, firmada por los presos expulsados, en la que se aseguraba que "esta lucha armada que desarrollamos hoy en día no sirve" cuando "se es tan vulnerable a la represión", por lo que abogaban por explotar "nuestro capital y potencial político".

El conocimiento público de esta carta llevó a ETA a acusar de su filtración a Aralar, formación escindida de Batasuna por su discrepancia en relación al terrorismo, y en concreto a su coordinador general, Patxi Zabaleta, que fue declarado "persona non grata" por el colectivo de presos.

La decisión tomada por ETA de expulsar a estos presos supondría, según informa hoy la agencia Vasco Press, un intento de asegurarse la cohesión interna dentro de la banda, ante una posible "negociación técnica con el Gobierno central".