El partido suní de Irak, atacado por apoyar la Constitución
Bagdad se blinda con medidas de seguridad a un día del referéndum sobre la Carta Magna
Los insurgentes, que han prometido obstaculizar el histórico referéndum de mañana sobre la nueva Constitución iraquí, lanzaron hoy dos ataques contra el principal partido suní del país después de que esta formación abandonase su oposición al texto y diera su apoyo a la futura Carta Magna. Ante la inminencia de la consulta popular, el país árabe ha adoptado espectaculares medidas de seguridad para evitar atentados, especialmente en Bagdad.
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En el primer ataque de hoy, los insurgentes hicieron explotar una bomba en el exterior de la oficina del Partido Islámico Iraquí en el centro de Bagdad. Horas depués, los insurgentes prendieron fuego a la principal oficina del partido en Faluya, al oeste de la capital. No se tienen datos de víctimas en ninguno de los dos incidentes.
Tras la oración del viernes en la mezquita del Gran Imán, la principal suní en Bagdad, unos 150 suníes protestaron contra este partido y acusaron a su líder, Muhsin Abdel-Hamid, de traidor. "Muhsin es un agente de Estados Unidos", gritaron los manifestantes, portando pancartas en las que se rezaba "no a la Constitución".
Bagdad, desierta
Mientras, la población iraquí vive hoy entre espectaculares medidas de seguridad, destinadas a evitar posibles ataques de la insurgencia, ante el referéndum constitucional convocado para mañana sábado. Las medidas de seguridad adoptadas son perfectamente visibles en la capital, donde las calles que dan acceso a los colegios electorales están cortadas por bloques de hormigón para evitar los ataques con coches bomba.
Además, los tejados de los centros de votación están tomados por tiradores de elite del Ejército iraquí, que vigilan desde allí para evitar posibles incidentes. La población de la capital parece que también ha decidido protegerse, y las calles de Bagdad aparecen hoy extrañamente vacías pese a ser viernes, día sagrado para los musulmanes, y los escasos vehículos que circulan son los de las patrullas militares y policiales.
Cierre de fronteras
Desde medianoche, las fronteras de Irak con sus seis países vecinos -Kuwait, Jordania, Siria, Turquía, Irán y Arabia Saudí- permanecen cerradas, situación que continuará hasta el domingo, una vez concluido el referéndum constitucional. Los vuelos comerciales con destino u origen en Irak han sido cancelados, y los aeródromos civiles iraquíes no funcionarán hasta que concluya la consulta.
También se ha restringido el tráfico interior y las fronteras entre las dieciocho provincias del país serán cerradas a las 18.00 hora local (15.00 GMT) de hoy, momento en el que quedará prohibida la circulación de vehículos entre las provincias. Y hasta el momento, las medidas de seguridad adoptadas por el gobierno de Bagdad, que incluyen también el despliegue de miles de miembros de los servicios de seguridad del estado, están dando resultado, ya que apenas se han registrado incidentes violentos en el país.
