Zapatero cierra filas en torno al Estatut junto a los socialistas catalanes

En Barcelona, por primera vez un secretario general del PSOE ha clausurado un Consell Nacional de los socialistas catalanes. Zapatero ha cerrado filas en torno al Estatut y Maragall ha asegurado que Catalunya es "la mejor solución" al problema de definición de España".

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha reclamado a los partidos catalanes un apoyo "entusiasta" pero "no resignado" al Estatut y al PP que no caigan "en lo fácil", en "usar los sentimientos para enfrentar a los territorios". En su opinión, los 'populares' no están preocupados por España sino por quién gobierna España.

Según Zapatero, el Gobierno del PSOE es que ha puesto las bases para avanzar en la convivencia democrática entre los territorios, en la paz y en la derrota de la violencia.

El presidente de la Generalitat y del PSC, Pasqual Maragall, aseguró este domingo ante el Consell Nacional de su partido que Catalunya es "la mejor solución" al problema de definición de España" y dio por hecho que "ha llegado la hora de la España plural" en la que es "compatible la afirmación nacional con la participación de un proyecto plural". El presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero asistió a este acto. Era la primera vez que un secretario general del PSOE asistía a un Consell Nacional del PSC.

En su intervención ante los cuadros se su partido -Zapatero aún no había llegado-Maragall evitó referencias a la negociación del Estatut y se limitó a reafirmar el "acierto" de haber formado el Gobierno tripartito en Catalunya como "apuesta estratégica de largo alcance" del PSC.

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Maragall reivindicó el papel central del PSC en la política española y catalana como máximo valedor de Zapatero en España y partido más votado en Catalunya, y pidió un esfuerzo a las bases socialistas para lograr en los próximos comicios una victoria "clara y sin dudas" que erija al PSC como el "primer partido de Catalunya" a los ojos de los ciudadanos.

Para Maragall, "si España mantiene a Catalunya como terreno sospechoso nunca se producirá esta fusión" y aseguró que "es el paso que estamos a punto de hacer" con la aprobación del Estatut. Según el presidente catalán, el problema "no es nuestra definición -la de Catalunya- sino la de España" y auguró que, una vez aprobado el nuevo texto de autogobierno catalán, "todos los estatutos querrán seguir la vía catalana".