Venezuela no va a nacionalizar a ningún etarras, según el Ministerio de Exteriores

El Gobierno de Venezuela ha hecho saber al Ministerio de Exteriores español que no va a conceder la nacionalidad a ningún etarra residente en este país latinoamericano, según han indicado fuentes del departamento de Miguel Ángel Moratinos.

El Ejecutivo de Hugo Chávez "desautoriza los términos del acuerdo" alcanzado por los abogados de los etarras, que asegura se tomaron "sin su conocimiento". Así se lo ha transmitido el ministro venezolano de Exteriores, Nicolás Maduro, al embajador español en Caracas, Raul Morodo, según informa el Ministerio español de Asuntos Exteriores.

Además, el gobierno venezolano asegura que tampoco reconoce un acuerdo que este mismo Ejecutivo firmó en junio con dos etarras para indemnizarles con 350.000 euros, puesto que su entrega a España se había producido en circunstancias irregulares. Venezuela dice que desconoce ese acuerdo, pero lo cierto es que se trata de un acuerdo amistoso firmado por Mª Auxiliadora Monagas, responsable del ministerio de Exteriores venezolano y por los abogados de los dos etarras, y avalado en octubre por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA.

Antes de estas explicaciones, el Gobierno de Zapatero había solicitado "con carácter urgente" una explicación a través de la Embajada española en Caracas y de la Embajada venezolana en Madrid. Además, solicitaba, si procedía, "la correspondiente rectificación" de la situación de estos miembros de ETA si se había procedido a la nacionalización.

Rubalcaba: una "decisión inaceptable"

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Durante la jornada de hoy, varios dirigentes políticos se han pronunciado sobre estas informaciones periodísticas. El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró en Bruselas que, si se confirmaba esta decisión sería "inaceptable" para España.

El presidente del Gobierno, por su parte, había pedido tiempo para comprobar si toda la información "era exactamente así y si se hubiera producido la consumación de esa adquisición de la nacionalidad".

Desde el PP, su portavoz parlamentario, Eduardo Zaplana, ha asegurado que "salvo que se desmienta, la decisión de Venezuela es un insulto al conjunto de la democracia española por mucho que el señor Zapatero diga que es muy amigo del señor Chávez".

Zaplana ha exigido al Gobierno una "respuesta tremendamente contundente en el ámbito diplomático" para evitar lo que ha calificado como "argucia bananera" que persigue "que los terroristas no paguen por sus delitos". El portavoz 'popular' ha exigido que el Ejecutivo "llame a consultas" al embajador de Venezuela en España.