Una testigo protegida dice que el hombre que vio en uno de los trenes no era Ghalyoun sino el huido Aouhnane

Madrid

La testigo protegido B-78 que tras los atentados del 11-M de 2004 aseguró que había visto en el tren que explotó en la calle de Téllez a uno de los acusados, Basel Ghalyoun, se ha retractado esta tarde de su anterior declaración y, tras serle mostradas dos fotografías de este procesado, ha identificado al huido Daoud Aouhnane como la persona que en realidad vio en el tren.

Después de mostrarle las fotografías de Ghalyoun, que sólo fue considerado autor material de la masacre por la fiscal y no por el juez instructor, la testigo dijo: "Éste es muy blanco, el otro es más moreno, se parece pero no es tan moreno como el chico que estaba en el tren".

Para Basel Ghalyoun la Fiscalía solicita 38.654 años de prisión, como el "chico" que la testigo vio el 11 de marzo de 2004 depositar una bolsa en el vagón y aseguró que la persona de aquella mañana era el huido Daoud Ouhnane.

"Ahora sé quien es, después de tres años", dijo y añadió que estaba "segura". La testigo, única persona que había reconocido a Ghalyoun como una de las personas encargada de colocar las bombas, vio por primera vez la foto de Ouhnane en un libro de su propiedad sobre el 11-M que aportó ante el tribunal. "Hace poco he encontrado un libro sobre el 11 de marzo y ahí está la foto del chico que estaba en el tren y creo que esa foto no la he visto antes", anunció.

Consulta de fotografías

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La testigo consultó en la sala varias fotografías de los acusados. Cuando llegó a la instantánea de Ghalyoun, que presentaba su firma, el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, encargado del interrogatorio le preguntó: "¿Ve ya a la persona del tren?" y la pasajera de los trenes respondió: "Aún no lo veo".

Cuando se le inquirió sobre si la persona que ella había reconocido tras los atentados era esa o no la testigo indicó que Ghalyoun "era muy blanco" y que la otra personas "era más morena". "No es el chico que estaba en el tren", dijo, "se parece pero no es tan moreno".

La testigo explicó sus contradicciones y aseguró que tuvo dudas en el reconocimiento porque tras la masacre "no estaba bien de la cabeza" y "estaba muy nerviosa". Según explicó, prestó declaración ante la policía cuando se encontraba ingresada en el Hospital Doce de Octubre a consecuencia de las heridas recibidas por la explosión.

"Hace tres años que he estado buscando a esta persona por las calles, que miro las caras y busco a esa persona", describió la testigo.

Relato de la mañana de los atentados

Relató los sucesos de la mañana del 11 de marzo y dijo que tomó el tren en Alcalá de Henares sobre las 7:10 o 7:15 con intención de bajarse en Nuevos Ministerios. A ella y una amiga con la que iba les llamó la atención "un chico que estaba en el tren y estaba muy cerca de nosotras. No hacía muchos frío y él llevaba gorro y bufanda, se fue a otro vagón y volvió otra vez", indicó y añadió que a pesar de la ropa de invierno le vio perfectamente la cara .

La testigo recordó que "el chico" puso la bolsa "muy abajo del asiento, como si la hubiera tirado muy abajo". Poco tiempo después Tinka, la amiga fallecida de la testigo, le dijo al apreciar que la persona que había visto ya no estaba pero que la bolsa aún seguí allí: "se ha dejado la comida". "Yo le dije que podía ser una bomba y ella me dijo que no", añadió.

Dos minutos más tarde explotó una bomba en el vagón contiguo. "Nos levantamos y empezamos a correr alejándonos de la bolsa", relató la testigo pero "explotó algo más y no me acuerdo de nada". "Mi amiga murió en el acto", explicó la testigo que añadió que ella aún tiene secuelas a consecuencia de las heridas recibidas.