UGT de la Televisión andaluza denuncia el intento de presión mediática del PP
En un comunicado dice que el boicot del PP a PRISA es "una forma intolerable de presión a la libertad informativa de sus profesionales"
La sección sindical de UGT de la Radio Televisión de Andalucía ha hecho público un comunicado en el que se solidariza con los profesionales del Grupo PRISA y denuncia "el intento de presión mediática del PP". Su texto es el siguiente:
El boicot del PP a PRISA, sólo puede entenderse como un atentado a la libertad de información, y como una forma intolerable de presión a la libertad informativa de sus profesionales. No sorprende, sin embargo, esta actitud intransigente del PP con cualquier medio de comunicación que no se pliegue a su campaña del "todo vale", por el acoso y derribo al Gobierno de Zapatero, que inició el mismo día en que perdió las elecciones.
Más información
El PP ha violado las más elementales normas políticas en una democracia, como la utilización partidista de la sangre derramada por el terrorismo; el debilitamiento premeditado del Estado español en el extranjero; o las sucias tretas para controlar el Poder Judicial.
Si ha usado campañas mediáticas para hacernos tragar ruedas de molino como que ETA está detrás del 11-M. Si ha manipulado vídeos para hacernos creer que actos vandálicos y manifestaciones contra SU Gobierno, eran actuales. Si utiliza un predicador fascista todas las mañanas, arengando a un nuevo Alzamiento, que mezcla información y opinión, sin respetar los más elementales criterios periodísticos. Si manipula sin pudor las radios y televisiones autonómicas que dirige, empezando por Telemadrid, donde sus trabajadores han denunciado reiteradamente la falta de libertad informativa y se han visto obligados a crear un Consejo Profesional en la sombra. No extraña, pues. Pero sí nos preocupa el boicot del PP a la Cadena Ser, al País, Cuatro, Tele 5, o Cinco Días entre otros medios.
Primero porque distorsiona la realidad y el agresor aparece como víctima. Una forma más de manipulación. Pero más importante nos parece, porque vulnera el derecho de los informadores de Prisa a contrastar la verdad, y el derecho de sus oyentes, lectores y espectadores a la libertad y pluralidad de la información, en el medio que ellos elijan. Ése es un camino que sólo lleva a la ruptura de las reglas democráticas, a la crispación, y a profundizar en una división interesada y sofista de la sociedad española.