Francia desgrava la compra de vivienda
El Presidente Sarkozy quiere un país de propietarios
El presidente Sarkozy quiere un país de propietarios. El Consejo de Ministros ha aprobado esta mañana un proyecto de ley que, entre otras medidas, introduce la desgravación de los intereses generados por un crédito para la compra de una vivienda como residencia principal en los primeros cinco años.
Más información
- Millonarios extranjeros disparan los precios de la vivienda en el Reino Unido
- El déficit de la Seguridad Social francesa será un 50% más alto que lo previsto
- Sarkozy recibirá al ultra Le Pen en el Elíseo
- Sarkozy mantiene la apertura en su segundo Gobierno con más incorporaciones de la izquierda
- Sarkozy vive su primera crisis de Gobierno tras la tibia victoria de la derecha en las legislativas
- Trabajadores clandestinos reformaban una residencia de los Sarkozy
- Sarkozy quiere que Blair sea el primer presidente de la UE
- Francia cierra aún más las puertas a la entrada de inmigrantes
- El PSOE apuesta por cambiar la deducción de la vivienda habitual por ayudas directas
El objetivo del Gobierno es añadir un punto de crecimiento anual a la economía francesa para situarse en el 2 ó en el 3%. En este sentido, se pretende rehabilitar el trabajo: desacreditado por la introducción de las 35 horas semanales, a juicio de Sarkozy. Para ello, las horas extras estarán exentas fiscalmente tanto para el empresario como para el trabajador. También se dulcifican el impuesto de transmisiones y se rebaja el llamado escudo fiscal para los más ricos: no deberán pagar a Hacienda más de la mitad de sus ingresos.
El paquete fiscal está evaluado en 11.000 millones de euros por el propio gobierno, 17.000 para la oposición, y será defendido personalmente esta noche por Sarkozy con una entrevista en la televisión.
Antes del conclave ministerial, el presidente francés ha recibido al líder del Frente Nacional, Jean Marie Le Pen, quien ha saludado "el gesto democrático" por haberle incluido en la ronda de contactos políticos de cara a la cumbre comunitaria que abordará el futuro de la "nonata" Constitución Europea. Es la primera vez que el dirigente ultraderechista es recibido en la residencia presidencial desde hace 34 años.
Tanto Mitterrand como Chirac habían establecido un "cordón sanitario" en torno a la extrema derecha que Sarkozy ha roto en aras de su estrategia de "apertura" política. No obstante, había olvidado a los Verdes -que sí están representados en la Asamblea Nacional-. El Elíseo ha rectificado y ha anunciado que sus dirigentes también serán recibidos.