El ministro de Defensa de Brasil, Nelson Azevedo Jobim, confirmó este martes que «no hay duda» de que los restos metálicos y asientos de avión avistados por el Ejército del Aire brasileño a primera hora de la tarde, a unos 650 kilómetros al noreste de las costas brasileñas, son del Airbus 330 de la compañía Air France desaparecido con 228 personas a bordo la noche del domingo. «No hay la menor duda de que los restos son del avión de Air France», afirmó Jobim en una rueda de prensa en Río de Janeiro. El ministro precisó que un avión Hércules C-130 de la Fuerza Aérea brasileña (FAB) «visualizó los restos, o sea, vio material diverso en una franja de cinco kilómetros». Barcos de la Marina de Brasil que se dirigen al área del océano indicada por la FAB recogerán los restos, indicó Jobim, quien agregó la mayor dificultad será encontrar las cajas negras del Airbus 330 que volaba de Río de Janeiro a París. La FAB había informado previamente de que entre los restos avistados figuraba un asiento de avión, trozos de metal y vestigios de aceite y queroseno. 228 personas desaparecidas El avión de la empresa Air France salió el domingo a las 19.00 hora local de Río de Janeiro y se le esperaba este lunes a las 11:15 en el aeropuerto París-Charles de Gaulle. Sin embargo, los pasajeros nunca llegaron a su destino. Air France mantuvo la última conversación el Airbus 330-200 a las 3.30 (hora española) en la que se informaba de un cortocircuito eléctrico después de atravesar una zona de tormentas con fuertes turbulencias. Posteriormente la compañía recibió mensajes automáticos que alertaban de averías aparecidas de manera inesperada. El último de estos mensajes se recibió a las 4.14. A partir de ahí el caso se convierte en un misterio. La hipótesis que más peso ha tomado para explicar la desaparición del airbus es que éste fuese alcanzado por un rayo. Este lunes el presidente de la compañía Air France la ponía sobre la mesa:«El avión podría haber sido alcanzado por un rayo. Es una posibilidad», sin embargo, varios expertos pilotos ponían en duda esta explicación ya que aseguran que un avión con las características del airbus está más que capacitado para soportar los rayos. En el vuelo viajaban 80 brasileños, 73 franceses, 18 alemanes, nueve italianos, seis estadounidenses, cinco chinos, cuatro húngaros, dos españoles (un hombre sevillano y una mujer catalana), dos ingleses, dos irlandeses y dos marroquíes.