Interior propone penalizar el "adiestramiento pasivo" para atacar a los 'lobos solitarios'

Se trata de castigar al que adoctrina en la comisión de un delito terrorista y al que recibe esa información. Esta es la línea general porque según fuentes del Ministerio del Interior no se han puesto todavía sobre la mesa los instrumentos jurídicos legales que se están estudiando. El objetivo es atajar el fenómeno de los 'lobos solitarios' y los dos frentes que preocupan son los centros de reclutamiento y los yihadistas que están combatiendo en Siria y que volverán a Europa. Según fuentes del Ministerio del Interior, Francia apoya la propuesta que España ha lanzado este viernes en Luxemburgo.

Le han llamado "adiestramiento pasivo" y el objetivo es penalizar no sólo al que cuelgue una información en la web o la difunda a través un púlpito radical sino penalizar también a quien consulte esa web o a quien escuche esa información en la mezquita.

Es decir, se trata de castigar al que adoctrina en la comisión de un delito terrorista y al que recibe esa información. Ésta es la línea general porque, según fuentes de Interior, no se han puesto todavía sobre la mesa los instrumentos jurídicos legales que se están estudiando. Interior viene barajando esta propuesta desde hace tiempo pero esta mañana la ha presentado en Luxemburgo. El Ministro del Interior ha insistido ante sus colegas europeos que "la legislación tiene que adaptarse a esta nueva realidad para que los Estados tengamos instrumentos jurídicos-legales adecuados para luchar frente a esa amenaza de terrorismo".

Es una propuesta española que trata de atacar el fenómeno de los lobos solitarios y que, según fuentes del Ministerio del Interior, cuenta con el respaldo de Francia, que ya castiga hacer proselitismo radical religioso a través de la red. Lo que se quiere es arrancar el compromiso europeo para redefinir lo que la UE calificó de terrorismo en el año 2008.

En lo que ya hay consenso es los dos frentes que preocupan a los ministros de Interior y Justicia europeos: los centros de reclutamiento y los yihadistas que han salido de Europa y que ahora luchan en Siria y que volverán a Europa sin la necesidad de pasar por los campos de entrenamiento.