Gallardón niega haber dado órdenes a la Fiscalía para beneficiar a la infanta

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha asegurado que el Gobierno no ha dado "ninguna orden" a la Fiscalía sobre la situación de la infanta Cristina y ha querido dejar claro que, de haberlo hecho, tendría que ser por acuerdo del Consejo de Ministros y, por tanto, se habría sabido.

Así ha respondido Gallardón en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados a la parlamentaria de Unión, Progreso y Democracia (UPyD), Irene Lozano, quien le ha preguntado si el Ejecutivo ha utilizado su "poder" para interceder en el destino de Cristina de Borbón a través del Ministerio Público.

"Me preocupa que no sepa que el Gobierno no puede dar ninguna orden al fiscal sin que lo sepa usted porque estamos sometidos al principio de transparencia y tiene que ser por acuerdo del Consejo de Ministros y sometido a la junta de fiscales de Sala del Tribunal Supremo", ha respondido Gallardón, sin citar ningún caso en concreto. El ministro ha enfatizado que la Fiscalía "no pertenece al poder ejecutivo" y está regulada en el artículo 124 de la Constitución dentro del título correspondiente al poder judicial, que no en el relativo al Gobierno. Además, según ha apuntado, su Estatuto Orgánico establece la "autonomía funcional" del Ministerio Público.

Durante su intervención, la diputada de la formación magenta Irene Lozano ha expresado su "perplejidad" ante el convencimiento del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de que a la infanta Cristina le "irá bien". "No ha adelantado ningún acontecimiento, salvo uno, el futuro penal de la infanta", ha ilustrado.

Dicho esto, ha pedido al Gobierno que desvele si también le irán bien "las cosas" a otros implicados en casos de corrupción, entre quienes ha citado a Luis Bárcenas, Miguel Blesa, Rodrigo Rato, Carlos Fabra, Oriol Pujol o Ignacio González "y su ático". "¿Cómo le va a ir a los cien imputados por corrupción en el PP de Valencia?", ha cuestionado. Así las cosas, ha preguntado si las palabras de Rajoy deben ser interpretadas como un deseo o si de ellas cabe extraer que el Ejecutivo tiene información acerca del futuro judicial de la Infanta Cristina o está participando en el proceso a través de la Fiscalía para garantizar la "impunidad" en un caso de posible corrupción.