El Gobierno impondrá el etiquetado de cinco colores en alimentos y bebidas
La ministra de Sanidad anuncia que se implantará este sistema de semáforo en los productos elaborados, que será obligatorio en un año cuando se apruebe el real decreto aunque muchas empresas ya lo hacen de forma voluntaria
Se va a negociar con la industria alimentaria para que esta se autorregule y limite la publicidad de los alimentos poco saludables dirigida a menores de 15 años. Si no cumplen, se tomarán otras medidas de control
No se descarta un impuesto para las bebidas azucaradas como el que ya tiene Cataluña
Madrid
Siguiendo el ejemplo de Francia -que ya adoptó el etiquetado nutricional frontal hace medio año- la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, ha anunciado este lunes que se va a instaurar en nuestro país el etiquetado de 5 colores -del verde al rojo- para luchar contra la obesidad. Los alimentos y bebidas procesadas (todo lo que no sea fresco) tendrán que representar con colores su contenido en azúcares, sales, grasas saturadas calorías, fibra y proteínas, de tal forma que los verdes identificarán los productos más saludables y los rojos los de menor calidad nutricional.
Los cinco niveles del NutriScore. / CADENA SER
Los cinco niveles del NutriScore. / CADENA SER
En sistema, conocido como Nutriscore, se empezará a ver en los supermercados en breve porque muchas empresas se están adhiriendo voluntariamente, pero la medida será obligatoria dentro de un año, el plazo en que estará aprobado el real decreto.
El Gobierno actuará contra la publicidad de comida basura para niños si la industria no pone límites
Durante la entrega de los Premios Estrategia Naos, la ministra ha informado de que se limitará la publicidad de los alimentos poco saludables dirigida a menores de 15 años mediante una reforma del código PAOS de autorregulación de publicidad. La idea es que las empresas se adhieran de forma voluntaria a esta reforma pero, si no es así, el Ministerio no descarta adoptar otras medidas de control entre las que se sitúa un posible impuesto a las bebidas azucaradas siguiendo el ejemplo de Cataluña.
Luisa Carcedo ha destacado que el 60% de los niños con sobrepeso mantienen este problema al llegar a la edad adulta y el contexto socioeconómico es clave: la obesidad llega al 15% de la población española que tiene el quintil más bajo de ingresos y, en cambio, al 9% de quienes se sitúan en el quintil de ingresos más altos.
También se va a desarrollar un protocolo o guía nacional para que a la hora de adjudicar los contratos de menús o cáterings en hospitales o universidades públicos, se tengan en cuenta criterios nutricionales además de los de seguridad y se va a desarrollar la ley 17/2011 para impedir que las bebidas y comidas con más azúcar y grasas trans lleguen a las cantinas de colegios e institutos.
