Los bloques frente a la crisis venezolana

Madrid

Juan Guaidó había pedido hace dos semanas apoyo para asumir el mando de Venezuela. Este miércoles tuvo el respaldo de Estados Unidos nada más autoproclamarse presidente del país, frente a la ilegitimidad, sostiene, de Nicolás Maduro. Junto a Washington, Canadá y varios países latinoamericanos no tardaron en apoyar al líder opositor. Y frente a ellos, un bloque encabezado por China y Rusia. Nunca como con la administración Trump había habido tanta sintonía entre el Kremlin y la Casa Blanca. Pero éste no es uno de ellos.

De hecho Rusia se ha afanado, primero a través de su ministro de Exteriores, Serguei Lavrov, y luego desde el propio Kremlin en advertir a Estados Unidos del riesgo de una posible injerencia en los asuntos internos de Venezuela. El reconocimiento de Guaidó como presidente venezolano por parte de Estados Unidos es, para el Gobierno ruso, "una nueva demostración de desprecio total de las normas y principios del derecho internacional y un intento de arrogarse el papel de juez de los destinos de otros pueblos".

En la misma línea, China acusa a Estados Unidos de "intrusión en los asuntos internos" del país caribeño. "China apoya los esfuerzos del Gobierno de Venezuela para mantener su soberanía, independencia y estabilidad", ha asegurado hoy la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores. También en esta ocasión se ha alineado con Rusia el gobierno turco, que también acusa a Estados Unidos de "interferencia" en los asuntos internos de Venezuela. "Declarar a Guaidó como presidente de facto llevará a Venezuela al caos", ha llegado a decir el ministro de Exteriores turco,  Mevlüt Çavusoglu. Cuba o México también se han alineado con Maduro.

Frente a este bloque, está el de quienes abiertamente consideran y apoyan a Guaidó como nuevo jefe del Estado venezolano. Canadá, Brasil, Argentina, Colombia o Guatemala comparten esa posición con Estados Unidos. Pero luego hay un bloque que, de momento, opta por contemporizar. Lo representa, sobre todo Europa. Forman parte de él quienes no llegan a reconocer a Guaidó, pero defienden un proceso democrático para dar una salida a la situación. "Apoyamos a las fuerzas democráticas del país", dicen desde la Comisión Europea. 

"El pueblo de Venezuela se ha comprometido valientemente con un futuro libre para el país. Para ello se necesita un proceso político que desemboque en elecciones libres y fiables. En este debe tener un papel importante la Asamblea Nacional democráticamente elegida", ha dicho en Twitter el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Seibert. Elecciones libres y fiables pide Alemania, mientras que el presidente francés, Emmanuel Macron, apoya "la restauración de la democracia" en Venezuela. Reino Unido tampoco considera a Guaidó jefe del Estado, pero sí da su "completo apoyo a la democráticamente elegida Asamblea Nacional con Guaidó como presidente". Otro gobierno europeo, el danés, habla del líder opositor como "el presidente del único órgano que en realidad es democráticamente legítimo en Venezuela" y espera que "las fuerzas democráticas tengan suerte en la lucha contra un régimen despótico y expulsen al socialismo demencial que ha llevado al país al borde de la catástrofe".

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En este bloque que no reconoce, al menos de momento, a Guaidó como presidente de Venezuela, pero sí pide elecciones, está nuestro país después de que el presidente Pedro Sánchez haya hablado por teléfono con el líder opositor.

Mientras tanto, Naciones Unidas ha pedido una investigación independiente y transparente sobre las víctimas mortales que han dejado los disturbios en Venezuela.