El Supremo aumenta la condena de La Manada a 15 años por violación
La Fiscalía ha hecho definitiva su petición de 18 años de cárcel por violación para todos
Madrid
Lo que ocurrió en ese portal fue una violación, no un abuso sexual. El Tribunal Supremo ha decidido condenar por un delito de agresión sexual a los cinco sevillanos conocidos como La Manada, aumentando además sus condenas hasta los 15 años de prisión.
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Explica el Supremo que los hechos probados, tal cual están redactados, "no pueden constituir un delito de abuso sexual, sino un delito de violación". La situación intimidante dentro del portal de la calle Paulino Caballero "hizo que la víctima adoptara una actitud de sometimiento, haciendo lo que los autores le decían que hiciera, ante el intenso agobio que la situación le produjo".
Además, el Supremo decide aplicar un agravante de trato vejatorio y otro más por cometer la violación entre varias personas. La decisión ha sido tomada por unanimidad con la magistrada Susana Polo como ponente: entre todos los acusados, además, deben indemnizar a la víctima con un total de 100.000 euros.
En un primer momento, la Audiencia de Navarra les impuso una condena de nueve años de prisión por un delito de abusos sexuales con prevalimiento - posteriormente avalada por el Tribunal Superior de Justicia - al entender que ella no había dado su consentimiento pero también que no habían usado la violencia contra ella.
Vista definitiva
La decisión del Tribunal Supremo llega apenas unas horas después de que se haya celebrado la vista definitiva del caso. La fiscal Isabel Rodríguez ha defendido que sus condenas se dupliquen por violación, defendiendo que "abandonar a la víctima desnuda y llevarse el móvil es un dato muy patente de que las relaciones en absoluto fueron consentidas".
En el mismo sentido se han pronunciado tanto la acusación particular como el Gobierno Foral y el Ayuntamiento de Pamplona con el abogado Agustín Martínez-Becerra pidiendo la absolución y asegurando que las relaciones fueron consentidas y que la joven denunció a los acusados al pensar que podrían difundir imágenes íntimas suyas.