Este sábado, en Carrusel Deportivo hemos vivido la consecución de dos nuevas medallas olímpicas: la primera medalla de oro de la delegación española, conseguida en la categoría de tiro olímpico, y la segunda medalla de bronce, obtenida en tenis. Dos medallas llenas de emoción, tal y como lo hemos vivido a través de los micrófonos de la Cadena SER y que esperamos que esta buena racha no acabe. Dos narraciones conmovedoras de dos hitos que ya quedan escritos en el libro de todo un país para la historia de los Juegos Olímpicos. El tenista español Pablo Carreño ganó la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokio tras derrotar al número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, por dos sets a uno, 6-4, 6-7(6) y 6-3. El asturiano rompió el tercer servicio al de Belgrado, visiblemente descontento con su actuación, y a punto estuvo de rompérselo una segunda vez en su quinto saque, en el que Djokovic cometió dos dobles faltas y Carreño tuvo dos puntos de set, pero finalmente se lo llevó defendiendo su saque y tras remontar un 15-40 que remató con un «ace». La segunda manga estuvo más reñida. Ambos tenistas defendieron sus servicios con todas sus armas, moviéndose por el fondo de la pista y ejecutando restos y dejadas para irse al «tie break», que fue para Djokovic por un ajustado 8-6 y que alargó el set a 63 minutos. El último set empezó complicado para Djokovic, al que no le beneficiaba un partido largo. Carreño defendió con arrojo su primer servicio y lo ganó en su tercera ventaja, a lo que el serbio reaccionó tirando la raqueta a las gradas vacías. Después el de Gijón le rompió el servicio y ganó el suyo para colocar el marcador con 3-0 a su favor e hizo que el número uno perdiera la compostura y otra raqueta al golpear el poste de la red. Carreño defendió todos sus servicios para conservar la ventaja y desplegó su mejor tenis en el último juego en disputa, que ganó en el quinto punto de partido para llevarse la victoria y la medalla de bronce en dos horas y 47 minutos de encuentro. La primera medalla de oro del deporte español en Tokio 2020 llegó del foso olímpico. Fátima Gálvez y Alberto Fernández dispararon al oro en una final por equipos mixtos emocionante, intensa, en la que la cordobesa se rehizo de un mal inicio y el madrileño, con nervios de acero, acertó 24 de sus 25 platos. La pareja española comenzó tirando al haberse impuesto en el desempate, pero el arranque no fue prometedor. Más bien todo lo contrario. Gálvez, una tiradora contrastada con un amplio palmarés, comenzó con tres fallos. Habló con Fernández, pidieron 60 segundos de tiempo muerto con un resultado provisional de 3-5. Acertó el cuarto, pero Alberto falló el suyo. No erraría ninguno más. Pese a sus fallos, los sanmarinenses no desistieron, a un acierto de distancia en todo momento. Un fallo de Gálvez se compensó con un fallo de Berti, y los españoles completaron sus platos con 41-39 a falta de los dos últimos de la pareja de San Marino. El sanmarinense falló su plato, y ya de poco importaba el de su compañera, que acertó. Los españoles eran campeones. Se abrazaron, festejaron y mordieron la medalla. 41 disparos para el primer oro del deporte español. Conseguimos dos medallas y la selección española ha dado un paso al frente contra la selección de Costa de Marfil. El conjunto de Luis de la Fuente consigue el pase a las semifinales tras ganar a una de las sorpresas de estos Juegos Olímpicos en la prórroga donde Rafa Mir consiguió el hat-trick. El conjunto español se jugará el pase a la gran final contra Japón, que ha vencido a Nueva Zelanda en la tanda de penaltis.