La bodega histórica de la Ribera que tiene enamorado al turismo estadounidense

Sotillo de la Ribera

Noviembre es el mes del enoturismo. Y de eso se sabe mucho en la Ribera del Duero. Pero hay quien lleva haciendo enoturismo -incluso sin que el término estuviera acuñado- mucho tiempo. Es el caso de Bodegas Ismael Arroyo, Valsotillo, que fueron pioneros en la Ribera del Duero. Miguel Ángel Arroyo así lo ha contado este miércoles en nuestro tiempo de radio con la Ruta del Vino.

"Nosotros tenemos una bodega histórica y nos daba orgullo enseñarla porque es bastante llamativa en cuanto a su tamaño, arquitectura, conservación... Nos hacía ilusión dar a conocer de forma altruista aquello que habíamos recuperado, y la gente quedaba sorprendida. Nunca pensamos que llegaría a tanto pero sí pensaríamos que esto evolucionaría y la gente apostaría por la historia de las bodegas y que vendría gente a visitarlas", dice.

Éxito de visitas estadounidenses

Lo que quizá nunca se plantearon ni siquiera hace unos años en Valsotillo era que la mayoría de ese turismo a sus instalaciones llegaría desde el extranjero, superando al nacional, y con un mismo país como origen en la mayoría de casos. "Tenemos contabilizados visitantes de 30 países diferentes, pero el 90% viene de Estados Unidos. Sorprende porque lo lógico es pensar que las visitas vienen de Europa por cercanía, pero no es así. Ellos parecen muy sensibles y amantes de estas cosas auténticas. Allí no hay pueblos como aquí, ellos el paisaje y el pueblo lo aprecian mucho. Y luego en la cata los vinos también los aprecian por su cuerpo, color, fruta, por su evolución... Tengo incluso ejemplos de gente de Estados Unidos que este año han venido y al final de la visita me han dicho que estuvieron aquí ya en 2017. Para repetir, qué experiencia se llevarían la primera vez...", se pregunta Arroyo, explicando todo el trabajo que llevan a cabo para tener esta visibilidad y la importancia que ha tenido el despegue de la marca Ribera del Duero.

El presente

Y ahora, ¿este sector está en su punto álgido? "Estamos en un punto fuerte pero aún puede evolucionar a más. Nosotros tampoco pretendemos hacer esto un parque de atracciones; la idea que tenemos es enseñar la bodega y lo auténtico del vino; el paisaje, el pueblo, cómo se hizo esta bodega subterránea, cómo se acondicionado y se sigue utilizando...", enumera, detallando que "hemos podido recuperar documentos históricos del siglo XVIII donde se lee la cosecha de vino que había con casi dos millones de litros de vino, y esa es la explicación un poco de por qué se excavaron túneles amplios para guardarlo y con cierta calidad de arquitectura".

La charla al completo puede reproducirse en el siguiente audio.