"Da igual que digan que lo aprendieron todo de sus madres si luego no contratan a mujeres": la incómoda reflexión de Lucía Freitas sobre el machismo en la cocina

Madrid

La gallega Lucía Freitas forma parte de la reducida minoría de mujeres que cocina en su propio restaurante y que, además, puede presumir de estrella Michelin. Tal y como señalaba un estudio presentado en el congreso Parabere Fórum, las cifras se reducen a medida que se asciende en la escala de reconocimiento social: en casa cocinan 9 de cada 10 y en las escuelas de hostelería representan un 40%, pero al puesto de chef ya solo llega un 15%.

Pero más allá de haberse convertido en una de las excepciones que confirman la regla, Lucía Freitas quiere que las cosas cambien y predica con el ejemplo. "Cuando llegas de prácticas a un restaurante siempre te mandan al cuarto frío. A las mujeres se nos presupone que tenemos inseguridades, que nos da miedo enfrentarnos al pase caliente. ¿Por qué? Por ignorancia y por machismo", asegura en una entrevista concedida al programa La sartén por el mango.

De hecho, el equipo de A Tafona, su restaurante de Santiago de Compostela, está formado casi íntegramente por mujeres. "Tengo un ejército de guerrilleiras", explica. "¡Solo tengo un chico! Creo es que tiene que haber mujeres seguras. Mi papel es darles un sitio. Así, dentro de unos años habrá muchas más mujeres dispuestas a cumplir sus sueños".

La lucha por la igualdad en la alta cocina lleva años en la agenda, pero no acaba de producirse. Una situación ante la que, a pesar de todo, la chef se muestra optimista: "Hay un camino sin retorno. Se ve en los horarios. Algunos empresarios piensan que, a determinada edad, la mujer no podrá trabajar 16 horas. Pero el error no es que sean hombres o mujeres, sino esas 16 horas. En cuanto haya horarios coherentes, la balanza se va a equilibrar. Y ya está empezando a pasar porque los hombres han estado en casa durante el COVID y se han dado cuenta de que también quieren criar a sus hijos. ¡Quieren horarios para poder estar con sus familias!".

"Los cocineros tienen pánico al tema del género"

Al preguntarle por situaciones concretas, como la escasez de cocineros que cogen la baja por paternidad, Freitas explica que el papel de chef, seas hombre o mujer, "implica estar en el restaurante todos los días", y más aún cuando se apuesta por una cocina muy personal.

Hablar del tema, en cualquier caso, incomoda a muchos hombres del sector. "Los cocineros tienen pánico al tema del género", asegura. "Y da igual que digan que aprendieron todo de sus madres si luego no contratan mujeres en sus restaurantes".

Lucía Freitas habla sin filtros y sus reivindicaciones le han llevado a enfrentarse con algunos colegas en más de una ocasión. Pero no se achanta: "Yo me presenté al concurso 'Cocinero del año' para cerrar bocas porque estaba harta de que la gente diera por hecho que en el restaurante yo era la de la partida de pastelería. ¡Yo era el alma!".