El chef Jordi Roca recupera su voz siete años después: "Soy el tío más afortunado del mundo"

Madrid

El restaurante en el que trabaja Jordi Roca tiene tres estrellas Michelin, ha sido el número 1 de 50 Best y lleva años agotando sus reservas con 11 meses de antelación. El pequeño de los hermanos Roca, además, ha ganado el título de mejor repostero del mundo, ha montado una heladería onírica, un hotel inspirado en el cacao... y cada vez que presenta novedades en un congreso, le aplauden a rabiar. También se ha codeado con jugadores del Barça o con el elenco de Juego de Tronos, entre otras celebrities. Pero fue ayer, 15 de marzo, cuando dijo sentirse "el tío más afortunado del mundo". ¿Porque le han dado otro premio? ¿Porque ha vuelto a ser padre? Nada de eso.

"No sabéis la alegría que tengo de poder hacer este vídeo, con esta voz que se me ha quedado voz de locutor de radio a las dos de la mañana. Como sabéis muchos de vosotros, hace siete u ocho años que perdí la voz por completo, me quedé totalmente disfónico. Durante este tiempo he tenido picos de voz que han ido yendo y viniendo, pero cada vez estoy un poco mejor, he ido mejorando la fonación", explicaba en un vídeo compartido a través de su cuenta de Instagram.

A Jordi Roca le diagnosticaron distonía, una enfermedad neurológica con síntomas como la tensión muscular —especialmente visible en su cuello— o la afonía. Pero el responsable de los postres en El Celler de Can Roca no ha dejado de trabajar en todo este tiempo. Eso sí, ha desarrollado nuevos superpoderes, como el de comunicarse con la mirada o el de elaborar postres voladores.

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"Puede ser que mañana no tenga"

"He aprendido a hablar sin esfuerzo. Aunque parezca mentira, cuando te pasa algo como lo que me ha pasado a mí, cuesta muchísimo retomar el hilo de la voz, e incluso puede ser que mañana no tenga", detalla en su vídeo. "Pero ya que la tengo, quiero agradecer a tantísima gente que durante este tiempo me ha apoyado y me ha dado consejos durante el proceso de recuperación y rehabilitación".

Jordi Roca ha mencionado a su mujer (Ale) y al resto de su familia, pero también "los jefes de cocina, los camareros y "toda la gente que trabaja en El Celler de Can Roca, Casa Cacao o Rocambolesc". En su publicación de Instagram, además, ha incluido el nombre de casi 40 personas.

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"Valorad la voz. Valorad lo que tenéis"

"No he dejado nunca de estar aquí, con cierta limitación, lógicamente, pero siempre me lo han puesto muy fácil. Quería agradecer vuestro apoyo y espero estar ya al 100% muy pronto. En el cuello sigo con dolores y tensión muscular, pero espero que pronto estemos a tope. Tengo ganas de enseñaros todo lo bueno que está por venir en El Celler. Parece un tópico, muy de cocinero, pero es verdad. ¡Lo mejor está por venir!".

El repostero catalán, visiblemente emocionado, ha asegurado que espera "poder seguir disfrutando" de su trabajo, que le apasiona y le encanta, y también de su equipo: "Amo El Celler, amo a mis hermanos, a mi familia, a mi pequeña... No sé qué más puedo pedir. Hoy soy el tío más afortunado del mundo. Valorad la voz. Valorad lo que tenéis".