Cuando tu placer culpable es la canción del supermercado: "Hasta la he buscado en Spotify"

Madrid

Entorno, el último libro de Claudia Polo, es un gran alegato a favor de la compra y la cocina consciente. En la entrevista concedida a Gastro SER, de hecho, propuso un ejercicio conceptual para mejorar nuestra perspectiva como consumidores: "Cuando visualizas dónde compras y dónde comes, te empiezas a cuestionar de dónde vienen las cosas y aparecen caras: la cajera, la frutera, la vecina... A mucha gente le saldría el mismo dibujo porque los supermercados son aburridos y poco estimulantes".

Pero el experto en vinos Santi Rivas —que defiende a las pequeñas bodegas y, sin embargo, opta por la comodidad del "turbocapitalismo" cuando se trata de ir a hacer la compra— también estaba en el estudio y replicó que los supermercados, al menos, "ponen musiquita". Una reflexión que reactivó un recuerdo y, a la vez, la confesión de una especie de placer culpable.

"Me encanta la canción del Eroski. ¡Hasta la he buscado en Spotify para escucharla en mi casa", reconocía Claudia Polo. "La letra es entretenidísima".

La balada del ahorro

Claudia Polo se refería a La cesta que enamora, una canción publicitaria lanzada en 2023 por la prestigiosa agencia Señora Rushmore (responsable también del Estoy tremendo, estoy crocanti, del Extra de Verano de la ONCE), con la que Eroski quería presumir de precios contenidos en un momento de crisis inflacionaria en el que a muchos españoles les costaba lidiar con el precio de los alimentos.

¿'Estoy tremendo', canción del verano?

La canción, efectivamente, se puede escuchar en Spotify y también en YouTube (en castellano, euskera y catalán). Escrita por Toni M. Mir, autor de muchas otras melodías publicitarias, La cesta que enamora se inspiró en I'Ve Got You Under My Skin, de Tony Bennett y Lady Gaga, pero incorporando, gracias a la producción de Trafalgar, un tono de parodia realmente divertido.

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La letra, de hecho, contiene versos geniales: "Este queso me hace / perder la razón / su precio me ha semicurado el corazón". Pero la mera enumeración de productos, cantada a pleno pulmón, acaba siendo hilarante: "Baguettes, jamones, naranjas, calamares, tortillas, yogures, chuletones"...

Humor contra la inflación

Según detalla Ainhoa Oyarbide, directora de Marca de Eroski, el objetivo de la empresa era responder a la situación inflacionaria "con un toque de amor y humor", ajustando al máximo el precio de 1.000 productos para que sus clientes "ahorraran tanto que acabasen enamorados", pero desmarcándose de las típicas campañas promocionales basadas en la oferta de determinados artículos.

"Queríamos hacer algo que reforzara la marca y la hiciese más cercana. Algo que nos ayudara a parecernos al típico amigo que cae bien. Alguien majo y en quien confías", explica a Gastro SER.

La campaña fue un rotundo éxito. Oyarbide asegura que nunca habían tenido tanto impacto mediático y que la repercusión fue "brutal". Al sonar en la megafonía de sus establecimientos, además, muchos trabajadores acabaron grabando vídeos cantando la canción y algunos clientes, como Claudia Polo, hasta se la ponían en casa para seguir disfrutando del tema.

La directora de Marca de Eroski reconoce que los creativos de Señora Rushmore "son buenísmos" y que les admira porque "hacen magia". Este año, de hecho, han optado por darle una vuelta de tuerca a la campaña. Si el año pasado apostaron por el amor a primera vista (con precios contenidos), en 2024 se han inspirado en otro tema de Umberto Tozzi para llegar a "la siguiente fase: el amor eterno".