Javier Rioyo: "Yo fui un niño falangista"

Madrid

Mañana se estrena en la 65ª Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), concretamente en la sección 'Tiempo de Historia', el documental 'Ángeles con espada', dirigido y escrito por Javier Rioyo. La película realiza un recorrido por el origen y proceso de edificación del Valle de los Caídos, y proyecta la historia de obsesión del dictador por su creación, basada en sus deseos de venganza y humillación, a través del testimonio de periodistas, historiadores, arquitectos y familiares de víctimas enterradas en el Valle.

Javier Rioyo, que además de director y guionista es articulista y director del Instituto Cervantes en Tánger, ha pasado hoy por los micrófonos de La Ventana para revelarnos el propósito y la inspiración que motivaron este documental. Una motivación que, según nos ha contado, tiene mucho de personal y autobiográfico. Rioyo admite sin pudor que fue “un niño falangista”. “Fui a campamentos de la OJE, con el uniforme falangista, y cantaba aquellos himnos que poco después me parecían ridículos”, afirma.

Lo primero que le impresionó del mausoleo cuando lo visitó por primera vez fue su enorme tamaño. Después, cuando fue expulsado de la OJE por “negarse a gritar ‘viva Franco’ en un campamento”, le sigue impresionado lo mismo. “Su colosalismo, la sensación de amenaza, de exceso, de orgullo del dictador, de humillación, de dominio estético”. Por esto y por muchas otras cosas decidió hacer el documental. “Porque me lo debo a mí mismo y a la historia”, afirma Rioyo.

Según su opinión, a pesar de que el Valle de los Caídos no sea, ni mucho menos, “el monumento a la concordia que intentaron vender, hay que visitarlo. "Para conocer nuestra historia reciente, lo que fuimos, nuestras diferencias y los disparates que se cometieron”. Rioyo ha querido señalar en especial la necesidad de enseñar el negocio que supuso la construcción del mausoleo que, después de El Escorial, ha supuesto el mayor desembolso de la historia de España.

Pero el proceso de grabación, gran parte del cual se produjo durante la exhumación del dictador, no fue sencillo. “Mientras los nietos de Franco se paseaban por allí como si fuera su casa, a nosotros no nos dejaron entrar los benedictinos, y Patrimonio no se atrevió a interceder”, nos ha contado Rioyo. Finalmente, el resultado es un documental que cuenta un hecho fundamental en la historia reciente de España, y que cuenta con las voces de personalidades como Diego Méndez, Lola Rabal, o Nicolás Sánchez Albornoz.

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