El 11-M y el cambio de Gobierno en España marcan la última cumbre de Aznar
La política antiterrorista y la Constitución, asuntos clave
Madrid
A las seis de la tarde comienza en Bruselas la cumbre europea de primavera. Esta cita estará protagonizada por los atentados del 11-M en Madrid y el cambio de Gobierno en España.
Aznar representará por última vez a España en una cita europea. A mediodía, el presidente en funciones viajará a Bruselas. A las tres de la tarde acudirá a la reunión del Partido Popular Europeo (PPE) y a las seis, acompañado por Rodrigo Rato y Ana Palacio, participará en la primera sesión de trabajo de la cumbre. A las ocho y media habrá una cena de todos los jefes de Estado y de Gobierno.
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Los dos asuntos fundamentales de esta cumbre serán la lucha antiterrorista y las negociaciones sobre la Constitución comunitaria.
Los líderes de la UE tienen previsto aprobar un plan de acción contra el terrorismo elaborado tras los atentados del 11-M en Madrid. Habrá un coordinador comunitario para la lucha antiterrorista que actuará a las órdenes del Alto Representante para la Política Exterior, Javier Solana. El ex secretario de Estado de Seguridad holandés Grijs de Vries es el candidato con más posibilidades de ocupar ese puesto. También se activará de inmediato la cláusula de solidaridad, que obliga a poner a disposición del país que sufra un ataque terrorista todos los medios de la Unión, incluidos los militares.
Además, los países miembros se van a comprometer a aumentar el intercambio de información entre sus servicios de inteligencia. También se obligará a todos los países de la Unión a poner en práctica antes de julio toda la legislación antiterrorista aprobada tras el 11-S y especialmente la orden europea de detención y entrega. Esta orden todavía no ha sido incorporada a las legislaciones de cinco países: Alemania, Austria, Italia, Holanda y Grecia.
AVANCES EN LA CONSTITUCIÓN
Además, el cambio de Gobierno en España ha reactivado las posibilidades de llegar a un acuerdo sobre el texto constitucional de la Unión Europea. Todo indica que los líderes europeos decidirán esta noche reabrir las negociaciones, aunque no se espera que entren en detalles sobre la Carta Magna. El presidente de turno, el irlandés Bertie Ahern, se mostró ayer optimista. Dijo que hay razones para pensar que se puede lograr un acuerdo global aceptable para todos. Ahern pretende que todo quede cerrado antes de que concluya en junio el semestre de presidencia irlandesa.
El principal problema que bloqueó la Conferencia Intergubernamental de diciembre es el reparto de poder, la fórmula para tomar decisiones en el Consejo Europeo. España y Polonia rechazaron de plano el sistema de doble mayoría (de Estados y población). El PSOE, sin embargo, sí cree que la solución pasa por ese sistema, aunque se manejan combinaciones diferentes. El proyecto constitucional inicial fijaba como mínimo para aprobar decisiones que estuvieran de acuerdo el 50% de los Estados que representen al 60% de población. No obstante, también se barajan otras como el 55% de Estados y 55 de población ó 50-65. También hay discrepancias sobre la composición de la Comisión y el reparto de escaños, pero según la presidencia irlandesa son superables.
En la cumbre que comienza hoy en Bruselas también se van a analizar otros asuntos como la candidatura a la dirección del Fondo Monetario Internacional (FMI), a la que opta Rodrigo Rato. Además, se estudiarán los retrasos que lleva Europa para convertirse en la economía más competitiva del mundo en 2010, algo que se pactó hace cuatro años en Lisboa. Se analizará también la situación de Oriente Próximo, Irak y los Balcanes.