El conseller de Obras Públicas reconoce errores en la gestión de la crisis del Carmel

El conseller de Obras Públicas de la Generalitat, Joaquim Nadal, ha reconocido esta mañana errores en la gestión de la crisis del Carmel y ha afirmado que "lo que ha pasado se hubiera podido prevenir". Así lo ha admitido durante el pleno extraordinario que se celebra desde las 10.00 horas para analizar la situación del barrio barcelonés, en el que 1.000 personas continúan desalojadas. El portavoz de CiU ha pedido la dimisión de Nadal por "irresponsabilidad" y ha solicitado la apertura de una comisión de investigación para detallar lo que ha ocurrido.

En el pleno, el primero de los dos previstos para analizar los derrumbes del Carmel a consecuencias de las obras del metro, Nadal ha dicho que el desatre no se podía prever, pero sí que se "hubiera podido prevenir", ya que se disponía de datos geológicos que informaban acerca de la estructura fragmentada del terreno.

Tras su declaración, le ha tocado el turno a CiU, que a través de su portavoz ha pedido la dimisión "inaplazable" del conseller de Obras Públicas por irresponsabilidad en la gestión de la crisis, a la vez que le recordó a éste que tras un primer desalojo, los vecinos se vieron obligados a una segunda evacuación ante la aparición de un nuevo socavón. Nadal, no obstante, ha manifestado que, mientras la prioridad sean los vecinos afectados, no entrará a definir las eventuales responsabilidades políticas.

La Generalitat anunció ayer que en los próximos días concederá las primeras ayudas a los más de mil vecinos que permanecen desalojados. El Govern adelantará 2.000 euros a las personas que se hayan quedado sin casa y 1.000 para los que necesiten rehabilitarla. Mientras, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, confirmó ayer el compromiso del Gobierno con los afectados, aunque dijo que aún no se ha concretado cuánto dinero se destinará a la rehabilitación del barrio.