Benedicto XVI asegura que no impondrá sus ideas

Después de la imposición del Palio y el Anillo del pescador, símbolos del poder papal, Benedicto XVI ha dicho en su homilía que su programa de gobierno no consistirá en seguir sus ideas ni en hacer su voluntad, sino en servir a Dios. La homilía ha sido pronunciada íntegramente en italiano. Tras la misa de inicio de Pontificado, Ratzinger ha recorrido la plaza a bordo de un jeep descapotable para saludar a los fieles. Luego, en el interior de la basílica, ha recibido a las 140 delegaciones internacionales asistentes a la ceremonia.

"Mi verdadero programa de gobierno es no hacer mi voluntad, no seguir mis propias ideas, sino de ponerme, junto con toda la Iglesia, a la escucha de la palabra y de la voluntad del Señor y dejarme conducir por El", indicó. El Pontífice agregó que será, de esa manera, Dios el que conduzca a la Iglesia en esta hora de tercer milenio.

Al concluir la misa, Benedicto XVI recorrió la plaza de San Pedro, entre las gentes, a bordo de un automóvil descubierto sin aparentes medidas de seguridad. Los miles de fieles ondearon banderas, aplaudieron y le aclamaron. Benedicto XVI, contento, sereno, sonriente, no cesó de bendecir, mientras sonaba en la plaza música de Bach y repicaban las campanas de San Pedro.

Saludo de los líderes mundiales

Tras este recorrido, los 36 jefes de Estado y de Gobierno que hoy asistieron a la Misa de Inicio de Pontificado de Benedicto XVI saludaron al nuevo Papa en la Basílica de San Pedro al término de la ceremonia. El presidente alemán, Horst Koehler, y su esposa fueron los primeros en intercambiar un saludo con el Papa Ratzinger, originario de Baviera, seguidos del canciller alemán, Gerhard Schroeder, y su mujer.

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Les siguieron el presidente italiano, Carlo Azeglio Ciampi, y los Reyes de España, don Juan Carlos y doña Sofía, que dialogaron durante unos instantes con Benedicto XVI, mientras éste les apretaba a ambos cariñosamente las manos. Tras los Reyes se acercó a saludar al Pontífice el resto de la delegación española, integrada por el ministro de Exteriores, Miguel Angel Moratinos; el de Justicia, Juan Fernando López Aguilar; y el de Defensa, José Bono.

Unas 140 delegaciones oficiales han participado en la ceremonia de Inicio de Pontificado, a la que asistieron cerca de 500.000 fieles.

También asisten a la ceremonia representantes de la iglesias ortodoxas, entre ellos el arzobispo Kirill, de Smolensko, "número dos del patriarcado de Moscú; de la Comunión Anglicana (el arzobispo de Canterbury, Rowan Williams), iglesias protestantes, iglesia armenia, entre otros. La misa se prolongará durante unas dos horas y al término de la misma Benedicto XVI recitará el Regina Coeli, que sustituye al Angelus en tiempo de pascua, y recorrerá la plaza entre los miles de fieles presentes. Después, saludará a las delegaciones asistentes.

Antes de la misa, Benedicto XVI ha bajado a las Grutas Vaticanas (cripta) para rezar junto con los Patriarcas de las iglesias orientales asistentes a la misa ante la Tumba de San Pedro. Los cardenales, mientras tanto, han esperado alrededor del Altar de la Confesión, en el centro de la basílica de San Pedro, bajo el que se encuentra la tumba de Pedro. Tras el rito, el Papa y los presentes, en procesión, salieron hacia el altar de la plaza de San Pedro, donde se celebrará la misa.