Los presos de Guantánamo no podrán recurrir la legalidad de su encarcelamiento ante los tribunales de EEUU
La Corte de apelaciones de EEUU niega el acceso jurídico en EEUU a los encarcelados
Washington
Una corte de apelaciones de la capital estadounidense dio hoy la razón al gobierno del presidente de EEUU, George W. Bush, al dictaminar que los presos en Guantánamo no tienen derecho a recurrir la legalidad de su encarcelamiento ante los tribunales civiles del país.
Dicha corte dictaminó que la norma promovida por la Casa Blanca es legal, y que entró en vigor con la firma de Bush el 30 de diciembre de 2005, afirmando que esos detenidos -algunos de los cuales llevan más de cinco años sin ser procesados- no tienen la posibilidad de cuestionar su encarcelamiento en el sistema judicial estadounidense.
Más información
- Bush crea un plan de ataque a Irán que podría ejecutarse en 24 horas
- La Casa Blanca esboza un plan para juzgar a presos de Guantánamo
- El Pentágono divulga la lista parcial de los presos de Guantánamo
- Solana ve una ligereza decir que los suicidios en Guantánamo son "un acto de guerra"
- El Pentágono hace públicos los nombres y nacionalidades de 558 presos de Guantánamo
- Sofocado el primer motín en Guantánamo
- El Congreso de EEUU aprueba un sistema de tribunales militares para enjuiciar a acusados de terrorismo
- Al menos ocho civiles afganos mueren cuando soldados de EEUU trataban de repeler un atentado suicida
- El Tribunal Supremo de EEUU rechaza la apelación de los presos de Guantánamo
- La Unión Europea aplaude el juicio sobre el 11-M al confrontarlo con Guantánamo
La corte de apelaciones del Distrito de Columbia concluyó, por dos votos a favor y uno en contra, que el Congreso estadounidense no se excedió en sus atribuciones al aprobar esa ley.
"Los tribunales federales no tienen jurisdicción en estos casos", señaló el juez Raymond Randolph en el dictamen.
Como consecuencia de ello, la corte desestimó los casos que han presentado gran parte de los prisioneros ante los tribunales y en los que alegaban "falta de jurisdicción".
La jueza Judith Rogers votó contra la decisión y afirmó en su declaración de desacuerdo que el Congreso no puede suspender el derecho de recurrir la legalidad de la detención, conocido como habeas corpus, "a menos que proporcione una alternativa adecuada".
Repercusión en Australia
La cuestión de los detenidos en la base estadounidense de Guantánamo, en el sudeste de Cuba, también fue tratado hoy por teléfono entre el presidente Bush y el primer ministro de Australia, John Howard, según informó el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca en un comunicado.
Howard pidió a Bush que agilice el juicio del australiano David Hicks, apresado en Afganistán en 2001, que lleva unos cinco años en Guantánamo bajo sospecha de terrorismo.
Su Gobierno pretende presionar también sobre el tema al vicepresidente Dick Cheney, que llegará a Australia el jueves.