EEUU desmiente la muerte de 18 niños por un atentado en Irak
El mando militar asegura que, en realidad, una explosión controlada ha causado 30 heridos leves
Una explosión controlada por soldados de Estados Unidos cerca de un campo de fútbol en la ciudad iraquí de Ramadi ha ocasionado 30 heridos leves, incluidos nueve niños, ha informado un portavoz militar estadounidense. Esta información desmiente la proporcionada previamente por policías y varios medios iraquíes que hablaban de casi una veintena de muertos.
El comandante Jeff Pool ha declarado a la agencia Reuters que no son conscientes del ataque descrito por soldados iraquíes: "No me imagino que haya habido un ataque a niños sin que nuestra gente lo desconociera". Pool agregó que los heridos tienen cortes e insistió en que no hay muertos.
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Esta misma localidad fue ayer, lunes, escenario de otra matanza, cuando una ambulancia conducida por un suicida causó la muerte de 14 personas, entre ellos tres niños, tres mujeres y cinco policías. Ramadi es la capital de la provincia de Al Anbar, bastión de la insurgencia suní.
Además, al menos 18 personas han perdido la vida y otras 69 han resultado heridas en la capital, Bagdad.
El ejército estadounidense anunció hoy que uno de sus soldados murió el lunes en una "operación de combate" en el oeste de Irak. Según una nota del mando militar estadounidense, el uniformado, un infante de la Marina, perdió la vida en la provincia de al Anbar, considerada feudo de la insurgencia árabe suní.
Con esta muerte, son ya 3.150 los soldados estadounidenses muertos en Irak desde la invasión del país en marzo de 2003.