Las primeras víctimas en declarar en el juicio del 11-M piden responsabilidad a Aznar
En una sesión llena de emotividad, los afectados por los atentados describen las secuelas que sufren
Madrid
Seis víctimas de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid han detallado esta tarde ante el tribunal las consecuencias de la masacre sobre ellos o sus familiares. En una sesión llena de emotividad, los testigos han relatado lo que ocurrió aquel día, han pedido condenas máximas a los culpables y responsabilidades políticas al Ejecutivo que gobernaba en 2004, el de José María Aznar.
Más información
- Los policías que detuvieron a Trashorras y el jefe de la Policía Científica declaran en el juicio del 11-M
- Un comisario niega que dijera que se usó Tytadine en los atentados del 11-M
- Zapatero dice que el juicio del 11-M pondrá de manifiesto "que la verdad se impone a la manipulación"
- El etarra Parot y dos miembros de la 'caravana de la muerte' testifican hoy en juicio del 11-M
- La Asociación Víctimas del 11-M califica de "crueldad innecesaria" la petición de exhumación de cadáveres
- 'El Egipcio' reconoció a un discípulo que maquinó el 11-M, declara un agente italiano
- Abu Dadah: "El abuso genera odio"
- La Guardia Civil encontró cuchillos, ropa robada y fajos de billetes en el coche de 'El Chino', pero no le detuvieron
Antonio Miguel Utrera, estudiante de 18 años cuando se produjo el atentado, que le ha dejado secuelas para toda su vida, ha recordado los instantes después a las explosiones como "un baile de sonámbulos". Utrera ha dicho que había "mucho silencio, la gente miraba a la nada, era una sensación rara, caminé por entre las vías y me encontré un muro de hormigón sobre el que me puse porque estaba muy cansado".
Como consecuencia de la explosión de las mochilas-bomba, Utrera sufrió dos coágulos de sangre en el cerebro que le fueron extirpados más allá de las 10 de la mañana. Los coágulos le provocaron tres infartos cerebrales que desembocaron en una hemiplejia. El testigo reclama "la máxima pena para los culpables y responsabilidades políticas para los miembros del anterior ejecutivo".
"Cadena perpetua"
Isabel Casanova perdió a su hijo y a su marido en la estación de Santa Eugenia. Hoy ha reclamado "cadena perpetua" para los asesinos, "exigencia de responsabilidad a los gobernantes de aquel momento y, por supuesto, respeto a las víctimas".
Francisco Javier García, cuya mujer resultó herida en el tren que explosionó en la estación de El Pozo, ha declarado que recibió una llamada de su esposa pidiendo ayuda desde el andén de la estación de cercanías. Se desplazó hasta allí en menos de dos minutos con su hija, ya que vivía cerca. Una vez accedió a la entrada vio, a la derecha "un montón de cadáveres", entre 10 o 15 personas "destrozadas, amputadas, evisceradas". García buscó a su mujer desde las ocho menos cuarto de la mañana hasta las ocho y diez. Tras esos 25 minutos de angustia, indicó, la vio a lo lejos. "Nos abrazamos los tres y dije: 'Qué suerte hemos tenido María, hemos sobrevivido!"
El primero en dirigirse a la sala fue Á.V.G, hermano de Laura Vega, que se encontraba en la estación de Atocha en el momento en que se produjeron las explosiones. Explicó que en el momento de la masacre Laura tenía 26 años y se dirigía a su trabajo. Su familia la localizó en un hospital a la una de la tarde del 11 de marzo, dijo. Actualmente, Laura se encuentra en estado vegetativo, tiene todas sus funciones "superiores perdidas" y no tiene capacidad de movimiento, voluntad, comunicación, no puede realizar ningún tipo de actividad por ella misma. Su hermano añadió que, a pesar de ello, se puede apreciar que "sufre" por ejemplo "cuando bosteza o tose".
Tardanza de ayudas económicas
Denunció, además, la tardanza de las ayudas concedidas por la administración que llegan, dijo, "siempre bajo demanda o petición, rellenando papeles". "A pesar de ello en muchas ocasiones no tenemos respuesta. El problema sanitario no ha quedado resuelto", enfatizó.
El ex marido de Pilar Manjón, presidenta de la Asociación de Víctimas del 11-M, y padre de su hijo Eulogio Paz, describió la angustia hasta el momento en que les confirmaron el fallecimiento del joven. Culpó, además, de forma directa al ex presidente del Gobierno José María Aznar e incluso apuntó que en un libro escrito por este "dice cosas como que la sociedad no era consciente de la amenaza del terrorismo islamista hasta el 11 de marzo".
Los testimonios provocaron emoción en la sala. Incluso algunos de los letrados se mostraron afectados por los relatos de las víctimas. Al término, el presidente del tribunal, Javier Gómez Bermúdez, interrumpió la sesión diciendo: "Creo que necesitamos 20 minutos de descanso".
Antonio Miguel Utrera, víctima del 11-M: "Parecía un baile de sonámbulos"
00:32
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/20070417csrcsrnac_4.Aes/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Isabel Casanova, víctima del 11-M, pide responsabilidad política a quienes gobernaban en 2004
00:19
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/20070417csrcsrnac_5.Aes/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>