Daniel Zamit asegura que el caos aéreo es la respuesta a una provocación del Gobierno

Tras la 'huelga salvaje' iniciada por los controladores el pasado viernes, la militarización del espacio aéreo y el decreto que establece el Estado de alarma, Daniel Zamit ha valorado la vuelta de los controladores a las torres de control y ha analizado las razones que han llevado a esta situación.

"Por no incurrir en algún asunto problemático, hablamos a título particular porque no sabemos si en estos momentos el sindicato puede estar operativo", advierte Zamit al comienzo de la entrevista.

Algunos foros frecuentados por controladores ya dejaban ver desde la medianoche del jueves al viernes que algo se estaba moviendo. Hacían un llamamiento a la "batalla final". ¿Había una estrategia previa? "El estado de desquiciamiento de la plantilla está reflejado por esta chica muy bien a título personal en su blog. La gente está muy harta, hemos trabajado mucho este año", justifica Zamit. Además, señala que "les quedan muy pocos derechos, nadie nos escucha y se ha producido este lamentable suceso porque nos han quitado los pocos derechos que nos quedaban".

"La gota que ha colmado el vaso ha sido este decreto que se podía haber dictado otro día. Es la repuesta a la provocación del Gobierno, que ha decretado los reales decretos coincidiendo con Semana Santa, el 31 de junio-previo vacaciones de verano -y ahora en el puente", asegura el portavoz del sindicato de controladores USCA.

Por otro lado, descarta que se preparase esta huelga salvaje en una cena el jueves en un restaurante de Madrid. "Esto ha sido una revuelta popular, la gente se ha rebelado contra una norma injusta porque AENA no puede garantizar el servicio hasta el 31 de diciembre", afirma.

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"Llevamos nueve meses desquiciados. Si por privilegiados entendemos que nos gusta nuestro trabajo y hemos trabajado mucho, somos privilegiados", se defiende Zamit y ataca al Gobierno al asegurar que "es un problema de la gente al frente de AENA porque son incapaces de garantizar las obligaciones de la ley". Por último, reconoce que el colectivo "ha sido ingenuo al rebelarse un día previo al puente" y niega que hayan pedido un aumento de sueldo como se ha publicado.