Bárcenas, de compañero "leal" a "delincuente"

Madrid

No hay que olvidar que el extesorero estuvo contratado por el PP hasta el pasado 31 de enero de 2013. Y que, como él reconoció, el partido le pagaba 21.300 brutos al mes, incluido el prorrateo de las pagas extra. Siempre gozó de numerosos privilegios como chófer, despacho, secretaria y hasta el pago del abogado para su defensa.

El PP ha pasado de confiar en la inocencia de Bárcenas a tacharle de "delincuente". Ha dejado de ensalzar su "lealtad" al partido y ponerle como "ejemplo de profesionalidad y buen hacer" a desvincularse por completo de él. Desde hace meses nadie quiere pronunciar su nombre. Y ahora que apunta directamente hacia Mariano Rajoy, la estrategia es muy clara: poner un escudo, proteger al presidente del Gobierno a toda costa y defender su honor.

Ahora toca cargar contra el extesorero. Los conservadores, que siempre habían apelado a la presunción de inocencia cuando un escándalo salpicaba a sus cargos, se han olvidado ya por completo de enarbolar ese estandarte. Desde el PP piden que no se crea en la palabra de su extesorero y que no se haga seguidismo de sus acusaciones. Son los argumentos que utilizan para no dar más explicaciones y que Rajoy no comparezca en el Congreso.

De hecho son los que empleó ayer para defenderse de la oposición que exigía explicaciones al jefe del Ejecutivo. El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Alfonso Alonso, pidió al PSOE que no lo hiciera porque con ello iba a "apadrinar" a "un delicuente y mentiroso". El líder de los socialistas, Alfredo Pérez Rubalcaba, le puntualizó que Bárcenas era "su delincuente".No hay que olvidar que ese "delincuente" del que todos hablan ahora, estuvo contratado hasta el pasado 31 de enero de 2013. No hace ni medio año. Aunque el partido no dejaba de insistir en que había abandonado todo tipo de responsabilidades.

Seguía como asesor y el PP le pagaba 21.300 euros al mes, incluido el prorrateo de las pagas extras. Lo reveló Bárcenas cuando interpuso una demanda por "despido improcedente" contra sus antiguos compañeros. El PP actuó exactamente igual con Jesús Sepúlveda, otro imputado por el 'caso Gürtel'. Hasta que no se dio a conocer que seguía colaborando con la formación conservadora, no se adoptaron medidas y le echaron del partido.

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También hay que tener muy en cuenta que Bárcenas siempre obtuvo un sinfín de privilegios: chófer, despacho, después la sala Andalucía de la sede del PP para dejar sus cajas, secretaria que hasta el último minuto le seguia haciendo gestiones... Durante un tiempo el PP le estuvo pagando incluso el abogado de su defensa (que cobraba más de 300 euros por hora de asistencia legal). Según Cospedal lo hacían porque llevaba más de 30 años trabajando para ellos. Hasta hace nada, el PP le defendía. De hecho el juez Ruz terminó expulsando al PP como parte acusadora en el 'caso Gürtel' por pensar que actuaba a favor de Bárcenas.

Rajoy todavía no le ha calificado de "delincuente". Habrá que ver si llega tan lejos y emplea la misma palabra en la rueda de prensa que ofrecerá el lunes tras su bilateral con Polonia. Hasta ahora jamás le ha atacado. Siempre ha medido sus palabras al referirse a él. Aunque lo previsible es que deje todo en manos de la Justicia porque el presidente no quiere volver a entrar en este tema. Ha pasado de defenderle a capa y espada a olvidarse de su existencia, aunque fue él quien le ascendió al cargo como responsable de las cuentas.