¿Por qué confiesa Jenaro García?
La confesión responde a una estrategia procesal que puede suponer una rebaja de hasta tres cuartas partes de una posible condena
El expresidente de Gowex, Jenaro García, responde ante el juez Pedraz, que investiga el falseamiento de las cuentas de la empresa de WIFI gratis en al menos los últimos cuatro años / ATLAS
El expresidente de Gowex, Jenaro García, ha sorprendido con su confesión firmada en un documento y la ampliación de su declaración este lunes ante el juez de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz, que ha superado las expectativas de los investigadores.
Pero su actitud colaboradora no responde al arrepentimiento o altruismo, sino a una estrategia procesal clara que puede beneficiarle por diversos motivos.
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El principal es que con la confesión presentada la semana pasada en la Audiencia Nacional, antes de que se hubiera abierto procedimiento judicial alguno contra él por su gestión en Gowex, Jenaro García obtiene un atenuante que puede llevar aparejada una reducción de hasta dos grados de la pena en una futura condena. La rebaja de un grado supone una reducción de la mitad de la condena, y los dos, la mitad de la mitad. Por tanto, por confesar antes de que se haya iniciado un procedimiento judicial, Jenaro García puede obtener un descenso de hasta tres cuartas partes de la condena final.
Es decir, si el máximo de pena al que se enfrenta por los delitos que se le imputan es de 13 años de cárcel, su estrategia procesal puede determinar que solo sea condenado a poco más de 3 años de prisión.
Pero no es el único motivo que ha provocado la confesión del expresidente de Gowex. Además de en España, las acciones de su empresa también cotizaban en Francia y en Estados Unidos. La legislación norteamericana es mucho más dura ante estos fraudes que la española y si se inicia un procedimiento judicial en este último país, evita que pueda ser extraditado a Estados Unidos.
Además, fuentes jurídicas están convencidas de que al confesar y asumir toda la responsabilidad del fraude, Jenaro García está protegiendo a terceras personas. Entre ellas a su mujer, vinculada desde los inicios a Gowex y al resto de empresas del conglomerado tecnológico.