Condenado un grupo de narcos que captaban las 'mulas' en la cola del paro

Madrid

La Audiencia Nacional ha impuesto condenas de hasta diez años y medio de cárcel a varios miembros de una organización de narcotraficantes que enviaban cocaína y metanfetamina a Japón desde nuestro país. La sentencia revela que los narcos escogían a las 'mulas' que llevaban la droga entre personas desfavorecidas de Murcia, captadas en la cola del paro o en el entorno de Cáritas y la Fundación Jesús Abandonado.

La investigación arrancó de hecho en Murcia en 2014 cuando la hija de una de las 'mulas' acudió a la Policía después de que su madre fuera condenada a casi cinco años de cárcel en Portugal, detenida con cuatro kilos de cocaína en el aeropuerto de Lisboa procedente de Brasil por encargo de la organización. La mujer había sido captada en la cola de la Fundación Jesús Abandonado de Murcia.

Según la sentencia, ese era el modus operandi del grupo: "Captar en las inmediaciones de las oficinas de desempleo, así como en centros de asistencia de caridad" a personas que aceptaran llevar la droga desde Sudamérica hasta Tokio a cambio de cantidades que oscilaban entre los 5.000 y los 10.000 euros "abusando de las apremiantes necesidades de dinero que tienen las personas que acuden a estos centros".

La droga, según la Audiencia Nacional, llegaba desde Brasil y Perú con destino Tokio previo paso por España escondida además dentro de bombones. El tribunal, con la magistrada Clara Bayarri como ponente, ha impuesto condenas de entre nueve y diez años y medio de cárcel a cuatro cabecillas de la organización y un año y medio de prisión a uno de los 'muleros' que confesó todo.

El mundial de fútbol

Los jueces consideran clave los testimonios de varios acusados que reconocieron los hechos y pidieron perdón, entre ellos el de uno de los hombres en situación desfavorecida que accedió a transportar droga a cambio de dinero: "Salí escarmentado", dijo en su turno de última palabra, después de explicar que trajo dos kilos de cocaína desde Brasil en 2014 coincidiendo con la celebración del Mundial de Fútbol. Para entonces ya tenía antecedentes por usurpación, robo y violencia machista.

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La sentencia, que según fuentes del caso ha sido ya recurrida ante el Tribunal Supremo, absuelve también a varios acusados y descarta que se cometiera también un delito de blanqueo de capitales. Uno de los absueltos ejercía como "blacktaxi", transportando a miembros de la organización por Madrid aunque según los jueces sin saber que se dedicaban al narcotráfico.