Por qué la segunda ola "no tiene justificación, se mire por donde se mire"
El bioquímico Mariano Barbacid culpa a la gestión de la pandemia: "No es un problema científico, sino de gestión sanitaria"
Un vagón atestado de gente en el Metro de Madrid. / Mario Montes
Madrid
"La segunda ola no tiene justificación, se mire por donde se mire". De esta forma, el bioquímico Mariano Barbacid ha reprochado a los líderes políticos la administración de la crisis del coronavirus en una entrevista en Las Mañanas de RNE. "La pandemia no es un problema científico, sino de gestión sanitaria", ha asegurado.
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El investigador del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas ha mostrado su preocupación al respecto de la COVID-19, ya que, a su juicio, "no parece que haya voluntad de hacerlo [solucionar esta situación] porque contratar más médicos con contratos mínimamente decentes o hacer reacciones de PCR y dar el resultado en unas horas no requiere mayor dificultad". "Ojalá pudiéramos curar el cáncer con algo tan simple", ha lamentado.
Deficiencias en el sistema sanitario
Barbacid ha señalado que la solución a los problemas de la Sanidad lleva exigiéndose desde hace mucho tiempo, incluso un mes antes del inicio del estado de alarma. Sin embargo, "no se les ha hecho caso". Ha comparado la situación con la "fábula del lobo": "Cuando viene, ya es demasiado tarde".
Aunque el científico ha incidido en que no trabaja en "el mundo hospitalario", indica que no es necesario estar allí "para saber que hace falta más personal". Asimismo, ha indicado que es mejor reforzar el sistema sanitario y de investigación "en tiempos de bonanza", en lugar de hacerlo en el momento de la crisis. Lo que le sorprende es que "ni siquiera se ha hecho cuando la pandemia ya estaba aquí".
Necesidad de financiar la investigación
El bioquímico ha informado de que la financiación en ciencia se ha reducido a la mitad en la última década y ha reclamado una solución al Ministerio de Ciencia y Tecnología. Por esa razón, ha defendido que "no aprendemos de los errores cometidos anteriormente", y eso, "un país lo termina pagando".
Por último, se ha referido a la necesidad en España de "líderes que interioricen la necesidad de dedicar más recursos a la investigación". "La ciencia no funciona a golpe de encuesta ni de elecciones", ha sentenciado.
